Los expertos lanzan un mensaje de tranquilidad cara al verano y auguran que la proliferación de mosquitos está bajo control, ya que los ayuntamientos han hecho los deberes y se están efectuando tratamientos de forma periódica. Ahora, con el aumento de temperaturas, están intensificando los controles, aunque recomiendaN efectuar las acciones de manera quincenal. Como ya avanzó Mediterráneo, los últimos estudios de muestreo han elevado de 36 a 48 los municipios de Castellón con presencia del mosquito tigre en un solo año. La existencia de este molesto insecto no se limita a la zona costera y ya está en el interior.

El diputado de Sostenibilidad, Mario García, se reunió ayer con el entomólogo de la Universitat de València Ricardo Jiménez, quien coordina los muestreos, y los técnicos municipales para «establecer los trabajos a acometer y mejorar la efectividad». «Todo apunta a que este verano será como el pasado y, si los ayuntamientos siguen realizando bien los tratamientos, no prevemos que vaya a peor. Puede haber algún repunte, porque siempre hay focos», remarcó García. En esta misma línea, se manifestó Jiménez, quien insistió en que «no existe ninguna alarma por el tema de los mosquitos», aunque «no hay que bajar la guardia».

TRATAMIENTO // La recomendación es que los tratamientos se efectúen cada 15 días entre marzo y octubre, es decir, una media de una veintena al año. El coste aproximado de estas tareas para un municipio de unos 20.000 habitantes, dependiendo de superficie y características, oscila entre los 5.000 y 7.000 euros anuales.

La Diputación «está manteniendo en todo lo alto la lucha contra estos insectos en aquellos municipios que se han detectado posibles focos para que el mosquito no se convierta en un problema para la salud pública», indicó García. Y es que, como resaltó Jiménez, Castellón es la provincia de la Comunitat que mejor está combatiendo esta problemática y advirtió de que la presencia del mosquito tigre puede controlarse, pero «no extinguirse».