El desabastecimiento de medicamentos en las farmacias de la provincia de Castellón va en aumento y no tiene visos de solucionarse a corto plazo con las molestias que esto está provocando a los pacientes. Los problemas de suministro afectan a 274 fármacos, aunque la cifra se situaría en 488 si se tiene en cuenta el modelo en el que se comercializan, es decir, tipos de envase. La problemática se abordará mañana en una reunión prevista entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas.

El presidente del Colegio de Farmacéuticos de la provincia, Sergio Marco, lamenta que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) asegure que la situación «está bajo control», cuando los almacenes reguladores que suministran a las boticas no disponen de determinados principios activos. «Es un tema serio del que deben estudiar las causas y dar soluciones», asegura Marco.

Y es que cuando un paciente acude a la farmacia a por un medicamento que no está disponible existen dos vías. La más sencilla es que el propio farmacéutico le dispense otro de las mismas características de otra marca, pero hay casos en lo que esto no puede hacerse debido a la complejidad de la enfermedad a tratar. Entonces el afectado debe volver a su médico para que le recete un fármaco alternativo. Esto también provoca que haya personas que peregrinen por diferentes farmacias para ver si alguna dispone de la medicina prescrita en sus estanterías si le urge su toma.

En la lista de medicamentos con problemas de suministro están algunas presentaciones de Adiro, Trankimazin, Primperán, Dalsy, Betadine gel, Dolalgial, Urbasón, Almax, Valsartán o Gine-canestén, entre otros.

Según la Aemps esta situación se debe a problemas «en la producción», ya que hay un incremento en la demanda mundial debido a los mercados emergentes que acceden a mejores sistemas de salud. También ha afectado el brexit, ya que Reino Unido ha hecho acopio de más fármacos ante la posible salida de la Unión Europea.