ReLevante by Miguel Barrera, ubicado en los salones del NH Mindoro, en la calle Moyano de Castellón, se vistió de largo ayer. Fiesta gastronómica de alto nivel con cinco chefs galardonados con la prestigiosa estrella Michelin en la Comunitat Valenciana, el Oscar de la buena mesa, y de los mejores caldos.

Junto al propio Barrera, quien con su Cal Paradís de Vall d’Alba puso en el mapa gastronómico internacional a un desconocido hasta ese momento Castellón culinario, Ricard Camarena, de Restaurante Camarena, de Valencia; Kiko Moya, de L’Escaleta, en Cocentaina (Alicante); Manolo Alonso, de Casa Manolo, en Daimús (Valencia); y Jorge Andrés, de La Sucursal (también de Valencia). Elaboraron cada uno de ellos un plato para deleite de los castellonenses, y tuvieron el privilegio de estrenar el nuevo espacio gastronómico de referencia en la capital de la Plana, expresando así su apoyo al cocinero castellonense más universal.

Un selecto menú conformado por aperitivos, cinco platos principales y dos postres. La interesante minuta, elaborada al alimón por las 5 figuras eminentes de la cocina más sofisticada, pero sin perder las raíces de fogones que mantienen el espíritu de cocinas más caseras y próximas al comensal, estuvo conformada por: tomata de penjar, sardina de bota y ajos a la brasa (cocinado por Barrera); ortiguilla de mar, codium y clóchina (también elaborado por el chef castellonense); ostra valenciana y aguacate con horchata de Galanga (fruto de la imaginación de Camarena); primavera en flor y sabayón de azafrán y polen fresco (obra surgida de la inspiración de Kiko Moya).

‘SUQUET’ DE BARCA // También suquet de barca, yema de huevo y cangrejo (a cargo de Andrés); rodaballo con jugo de espinacas, alcaparras y albedo de Cidra (cocinado por Alonso); lomo de cangrejo de ojo negro, langostino de la lonja y setas de Sant Jordi, xitric y textura de leche, cacao y avellanas, todo ello también ejecutado por Barrera. Exigente y variopinta propuesta en la que la gastronomía local y los productos de la tierra más nuestra, la de las raíces, fueron protagonistas, como claro reflejo de lo que desea ofrecer Miguel Barrera en su nuevo restaurante, que quiere convertirse en uno de los templos gastronómicos por excelencia de la Comunitat Valenciana.

Otro de los objetivos es “hacer de Castellón capital de la buena mesa, y a la que podrán viajar potenciales turistas en la unión de una gastronomía de calidad que pueda ser admirada por propios y extraños”, aseguró.

“También aquí hay buenos profesionales, pero hay que dar un nuevo paso, otro salto en calidad, unos niveles de excelencia que aúnen competitividad, innovación, entusiasmo y emprendurismo”, concretó.

CONVIVENCIA FRATERNAL // Pero lo mejor, lo más trascendente, fue la jornada de convivencia de los 5 chefs. Compartieron secretos, confesiones, magisterio e imaginación al servicio de una cocina que une tradición y vanguardia, y así lo explicaron los maestros de los fogones, instantes antes de servir a los comensales sus fantasías de texturas, sabores, olores, formas y colores, desde la dedicación más sacrificada.

Barrera detalló que en su nuevo proyecto la carta abarca productos de la huerta y de la lonja de Castellón, “en una combinación con el lugar” que es escenario de su restaurante, “el Mindoro, en el centro de Castellón, y hotel de referencia y calidad con más de 40 años de historia en la evolución social y ciudadana”.

El grupo NH, referencia en el universo hotelero, cuenta con nueve establecimientos en la Comunitat Valenciana: 2 en Castellón (Mindoro y Turcosa); 5 en Valencia (Ciudad de Valencia, Center, Valencia Las Artes, Valencia Las Ciencias y Puerto de Sagunto), y otros dos en Alicante (Alicante y Rambla de Alicante). H