En el problema de los robos en el campo se ha detectado últimamente una nueva modalidad. Se trata de collidors “que, cuando acaban su jornada, llenan el coche” para llevar esta naranja “a varias fruterías” en donde no se siguen los protocolos de trazabilidad, denuncia el propio secretario técnico de la Federación Provincial de Agricultores de Castellón (Fepac), Doménec Nàcher.

Y es que los cítricos aglutinan la mayor parte de los robos en el campo, como ayer denunció Mediterráneo, y además han ido al alza en este inicio de año debido a los buenos precios de los cítricos, señalan los implicados.

Así las cosas, aunque este tipo de robos por parte de collidors son “muy difíciles de detectar”, señala Nácher, socios de esta organización agraria “lo han visto”, asegura. Otro aspecto que los confirma es que en los campos en que se producen estos robos los propietarios “no llegan a las estimaciones de fruta”.

Y es que, aunque lo que roba cada collidor, suele ser una cantidad pequeña y la inmensa mayoría de las cuadrillas no lleva a cabo esta práctica, cuando se produce en una, “lo suelen hacer todos sus componentes”, con lo que, a la larga, “suman bastantes kilos”, indica Nàcher.

De esta manera, se trata, fundamentalmente, de collidors que trabajan para empresas de trabajo temporal que no pagan los jornales como recoge el convenio y “por culpa de los bajos salarios” llevan a cabo esta práctica, dice.

Eso sí, Nàcher reconoce la labor que, a la hora de prevenir los robos y detener a los infractores llevan a cabo las fuerzas de seguridad, como la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Local. Además, destaca los documentos Data, que llevan los camiones y marcan la trazabilidad. H