La Formación Profesional (FP) pierde tirón en Castellón. Tras cuatro cursos con las cifras de matrícula prácticamente en stand-by tras el alza anterior, este 2018/19 se nota ya una caída importante de alumnado, que roza los 1.000 inscritos respecto a ese máximo logrado hace cuatro años Así, por primera vez desde el 2014, el total queda por debajo de los 10.000 alumnos. Y todo en medio de la campaña de captación de estudiantes técnicos 4.0 por parte de las empresas e IES; con el arranque de un Acuerdo estratégico para prestigiar la FP presentado a nivel nacional por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; y la ministra de Educación, Isabel Celaá; y con la mesa por la FP activada por la Conselleria de Educación y la de Economía junto a empresarios, con nuevos ciclos, más atractivos y con paro cero como el de Química Industrial en la capital.

Con los datos de Educación en la mano, Castellón suma 9.866 estudiantes matriculados este curso en FP, desde la básica, diseñada para jóvenes de 15 a 17 años --1.376--, y de grado medio y superior --8.208-, hasta los programas formativos de cualificación básica (PFQB) --282--, en vías de extinción. Son cifras por debajo de los 10.671 del máximo histórico de la provincia, de septiembre del 2015, tras una escalada de más de una década, con un incremento del estudiantado de hasta un 76% (ver gráfico adjunto) que sitúa a la provincia por encima de la media nacional, del 71%.

MÁS EMPLEO

Desde los institutos, sus directores señalan que esta caída de matrícula puede deberse a la bajada la natalidad, por una parte; y a la reactivación del mercado laboral. «Durante los años de la crisis, mucha gente en paro se reenganchó a una FP para mejorar currículo o reciclarse, y ahora han terminado o tienen empleo», dice Ricardo Arnau, del IES Politècnic. Ayer mismo, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) presentó un informe en el que destacó que España se sitúa ya entre los países con menor proporción de alumnos que eligen la FP, un 35% entre los 16 y 18 años, por debajo de la media europea, del 48%.

La campaña estatal abarca todos los niveles. Desde la televisión, donde se ha activado el plan #YoCreoEnLaFP de la Fundación Mapfre; o la Alianza por la FP Dual de Bankia y la Fundación Bertelsmann, con un objetivo de que la sociedad «sea consciente de las innumerables posibilidades de estos estudios para mejorar la empleabilidad juvenil y reducir el abandono escolar».

Cambiar el paradigma para un mayor reconocimiento social de estos estudios es una de las máximas de los directores de FP. Ricardo Arnau explica que «es vital cambiar la concepción de los estudios técnicos, no son de segunda, sino una pieza clave para mejorar el empleo y eliminar la brecha salarial entre los técnicos, muy buscados». Según Arnau, para generar profesionales para la nueva industria 4.0 y prestigiar la FP «hace falta más inversión, para que vaya a la par, en tecnología y estudios actualizados, y dé respuesta a la economía de Castellón». «No vamos a la misma velocidad que las empresas», dice, y pide «más FP dual, que involucre más a las pyme, y sume a la formación del alumno en el puesto de trabajo la de los profesores».