La brecha de género persiste en la Formación Profesional (FP) en cerca de medio centenar de titulaciones, de la FP básica a la superior. Parte de ellas tienen una preeminencia del género masculino, aunque hay otras en las que sucede todo lo contrario.

Durante este curso, según la Conselleria de Educación, hay matriculados en la provincia de Castellón 10.776 alumnos, de los que casi el 56% son hombres y el resto mujeres. Son unas décimas más que el curso anterior, en que el porcentaje fue del 54,9%.

La distribución está bastante equilibrada en el global, pero hay ramas en las que la brecha se amplía. Por ejemplo, áreas como Sanidad, Servicios Socioculturales y a la Comunidad, Textil o Imagen Personal tienen una preponderancia de mujeres.

En el ciclo superior de Educación Infantil y en Promoción de la Igualdad de Género menos del 10% de inscritos son hombres, lo mismo que en el medio de Atención a Personas con Dependencia (ver cuadro). En el grado superior Estética, de los 38 inscritos solo hay un varón y en el medio hay dos chicos de 158. En Cuidados Auxiliares, ellos solo suponen el 13%. En Arreglo de Artículos Textiles hay solo 4 varones de 27.

Lo mismo sucede, pero al contrario en las ramas de Electricidad y Electrónica, Energía y Agua, Fabricación Mecánica, Instalación y Mantenimiento, y Transporte y Mantenimiento de Vehículos. De hecho, casi una decena no tiene ni una alumna, y en otras están en minoría. Ejemplos Mantenimiento de Viviendas; Fabricación y Montaje, en grado básico; Mecanizado y Carpintería y Mueble; Instalaciones de Producción de Calor o Frigoríficas en medio o Mantenimiento Electrónico en Superior.

Consciente de esta situación la Conselleria de Educación dispone de ayudas de 600 euros para fomentar el acceso de alumnas a 37 ciclos de Formación Profesional (FP) masculinizados de estas especialidades concretas.

Se trata de títulos con muy escasa presencia femenina y que han experimentado una disminución de alumnado en los últimos años, pero que presentan una buena inserción profesional. Las ayudas tratan de fomentar la incorporación de la mujer en sectores productivos con elevado potencial de empleabilidad, informan fuentes de la Conselleria.

La convocatoria del curso 2018/2019 no se ha resuelto todavía, aunque en el anterior 17/18 se distribuyeron por valor de 94.600 euros a las que optaron 130 y se otorgaron 97 ya que el resto no cumplía los requisitos. Entre las beneficiarias hubo una alumna del IES Penyagolosa de Castelló y otra del IES Botànic Cavanilles de la Vall d’Uixó.

La presidenta de la FAMPA Penyagolosa, Silvia Centelles, reconoce: «Aún hoy, en el siglo XXI, seguimos arrastrando los restos de las sociedades patriarcales, donde había cosas de y para chicos y cosas de y para chicas». «Combatir esto y que no se produzcan estas desigualdades pasaría por hacer políticas sociales de igualdad. Cada vez la educación va más encaminada a generarlas. Pero todavía queda bastante trabajo por hacer al respecto», señala.