La detección de una fuga de gas en uno de los quirófanos del Hospital Provincial de Castellón que han permanecido cerrado durante el verano por las obras que se vienen acometiendo en el centro ha obligado a suspender sine die las intervenciones en esta sala.
El escape de protóxido de nitrógeno se localizó el pasado 29 de septiembre y desde entonces no se ha podido utilizar el quirófano número 1, dedicado a intervenciones del servicio de Oftalmología del centro. Desde el Consorcio Provincial se señaló ayer que los servicios de mantenimiento del centro vienen trabajando desde entonces para restaurar la normalidad en el menor tiempo posible.
Esta sala fue una de las que se cerraron este verano para hacer unas obras de adecuación cara a mejorar la instalación y a la obtención del certificado ISO como sistema de gestión de la calidad.
Esta incidencia en los quirófanos del Provincial se suma al cierre, a lo largo del pasado mes de agosto, de otra de las salas a consecuencia de la aparición de moscas, que obligó a desinsectar buena parte de las instalaciones ubicadas en el sótano.
Desde el Consorcio se trató ayer de minimizar los efectos que esta fuga pudiera ocasionar en el servicio de cirugía oftalmológica y se señaló que a lo largo de las próximas horas se resolvería este asunto, sin embargo eludió hablar de medidas concretas, costes y plazos concretos para la total resolución de un incidente que era ajeno a la generalidad tanto de los trabajadores como de los pacientes, según pudo certificar Mediterráneo.
EL COMITÉ LABORAL, AJENO // Por otro lado y tal como sucedió recientemente en el Hospital Universitario de la Plana, con el cierre de cinco habitaciones de una misma planta a causa de un brote de legionela, el comité de salud laboral permanece ajeno a estas circunstancias y algunos de sus miembros admitieron no contar con información sobre esta fuga de protóxido de nitrógeno.
El también llamado óxido nitroso es un gas de uso muy común en el ámbito médico y un escape de estas características no tiene por qué suponer un riesgo para pacientes ni empleados, según explican fuentes especializadas consultadas, aunque desde el ámbito sindical sí se señaló ayer que cualquier incidente de este tipo debe ser notificado a los representantes de los trabajadores, algo que, según parece, no se ha hecho en este caso.
En este sentido, representantes sindicales, que no ocultaron su preocupación, sí mostraron ayer su interés en profundizar en este asunto y reclamar la información por la vía ordinaria que corresponde con el fin de valorar su impacto y las circunstancias en las que se había desarrollado esta fuga de gas y el posterior cierre de las instalaciones, recientemente sometida a obras. H
