La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) reclamó ayer «la reforma legal para que los funcionarios de prisiones tengan el reconocimiento legal de agentes de la autoridad», tras la agresión a tres trabajadores del centro penitenciario de Albocàsser. Los hechos tuvieron lugar el pasado viernes mientras los empleados de la cárcel cambiaban de celda a uno de los presos internos del módulo de aislamiento.

Desde CSIF recordaron al ministro Marlaska y al secretario general Ortiz que su «deber y obligación es poner todos los medios humanos, técnicos y materiales para aminorar al máximo este tipo de incidentes». En la misma línea, el sindicato exigió unas retribuciones, amparo y recursos «acordes con la importancia de la función que se les encomienda y el medio de trabajo en que se desenvuelven».