Todas las miradas se centran estos días como es lógico hacia los centros sanitarios. En ellos, muchos contagiados con coronavirus están luchando sin tregua contra la enfermedad arropados por médicos y enfermeras, que reclaman más medios en esta dura batalla. Menos dramática es hasta el momento la situación en los centros penitenciarios de Castellón, pero los funcionarios no esconden que «se masca la tensión» y temen que se repitan incidentes como en Italia, donde se han registrado ya motines en decenas de cárceles.

La UME acudió el pasado viernes a desinfectar el centro penitenciario de Albocàsser, pero José Manuel Fernández, delegado del sindicato Acaip (Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias), lamenta que no es ni mucho menos suficiente para evitar que la pandemia se introduzca en las cárceles, con las consecuencias que eso conllevaría. «Nos piden las autoridades que cada funcionario debemos estar equipados con un EPI, equipo de protección individual, que lleva guantes de nitrilo, mascarillas y gel hidroalcohólico. En Castelló, donde trabajo, solo hay gel, mientras que en Albocàsser solo tienen guantes», lamenta Fernández.

Esta desprotección, asegura el delegado sindical, está provocando «el nerviosismo en el interno, al que además se le ha cortado todo contacto con el exterior para evitar contagios». Afirma Fernández que los trabajadores están «todo el día lavándose las manos», pero considera «necesario que se distribuya más material a los centros penitenciarios de la provincia de Castellón».

Denuncia la misma fuente «una falta absoluta de previsión por parte del a Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y del Ministerio del Interior», al tiempo que se felicita porque «de momento no se han registrado sucesos peligrosos o graves pese al estado de nerviosismo actual». Confirma el delegado de Acaip que «a fecha de hoy no existe ningún caso de coronavirus entre internos, ni funcionarios en las cárceles de Castellón», al tiempo en que incide en pedir «los medios de protección» para que el contador se mantenga a cero.