Cualquier momento de crisis es una oportunidad, y eso es lo que busca Castellón ante los efectos de la pandemia de covid. A este respecto, hay una idea en la que coinciden responsables políticos, agentes sociales y analistas: reforzar la industria es el mejor vehículo para salir reforzados. La provincia ya tiene una amplia experiencia en este campo con el clúster del azulejo, y a ese referente se unen nuevos desafíos, como la investigación de nuevas formas de producir y consumir energía, y la inyección de capital procedente de los fondos europeos.

El catedrático de la UJI Xavier Molina detalla como punto de partida la presente emergencia sanitaria. «El resultado está siendo desigual según sectores», afirma. Mientras la hostelería y el turismo sufren de falta de clientela por las restricciones y advierten de cierres masivos si no cambia pronto la tendencia, «los datos de la cerámica no han sido malos; solo hay que ver las cifras de exportaciones de los últimos meses, con lo que el impacto está siendo bajo».

A esta percepción se unen planes que ya están en marcha. Uno de los más comentados de los últimos tiempos es la planta logística que la multinacional Amazon prepara en un polígono de Onda. La obra ya está en marcha en una parcela de 200.000 metros cuadrados, y se prevé que suponga 1.000 puestos de trabajo.

El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) en Castelló, Sebastián Pla, afirma que en un «momento de incertidumbre como el actual, invertir en un sector tan importante como es el industrial es invertir en futuro». Añade que cara a los próximos tiempos resulta «fundamental aumentar el peso de la industria en la provincia por su efecto tractor en otros sectores, así como por su capacidad exportadora y de innovación. Sin olvidar que es un generador de empleo estable y de calidad».

Un aspecto en el que también incide Molina. «Los puestos de trabajo de la industria tienen un efecto de arrastre sobre otras actividades, como las relacionadas con los servicios y la logística». En este sentido se mueven los planes de inversiones de PortCastelló, como principal vía de entrada de materias primas y salida de las exportaciones provinciales, o incluso el centro de almacenaje de materias primas que el grupo Pamesa ha puesto recientemente en marcha en Onda.

En esta línea, el conseller de Economía, Rafa Climent, anunció recientemente que este año «se desarrollará la cuarta fase del Plan Estratégico de la Industria Valenciana, un claro ejemplo de la firme apuesta de la Conselleria por seguir desarrollando una política industrial de alto valor añadido, limpia, resiliente y diversificada».

Novedades

Dentro de estos proyectos están los planes de descarbonización de la industria. Un ámbito en el que Castellón debe ser un factor fundamental, de la mano de la industria cerámica. Tanto las empresas energéticas del entorno del puerto como las propias azulejeras participan en planes de hidrógeno verde, que den una respuesta a los retos de la fabricación cerámica. Algo que requiere inversiones de fondos europeos y para lo que se preparan plantas piloto en la provincia.