El diputado provincial de Ciclo Integral del agua, Renovables, Residuos y Reciclaje, Ignasi Garcia, mantuvo ayer una reunión con representantes de la Unió de Llauradors y su secretario general, Carles Peris, para encontrar puntos en común para la gestión de purines en las comarcas de Castelló en esta legislatura.
La Diputación gestiona cinco plantas de purines situadas a los pueblos de Todolella, Salzadella, Sant Mateu, Vall d’Alba y Albocàsser. Cuatro de ellas nunca se han puesto en marcha y en la actualidad se encuentran «abandonadas y desmanteladas», según Garcia. La única que funciona hoy por hoy es la de la Todolella, en Els Ports, aunque lo hace de manera «deficitaria», tal como se desprende de los informes emitidos por la Unió de Llauradors.
Frente a esta situación, el diputado sostiene que hay que dar una solución sostenible en el tiempo a las plantas de purines por dos motivos fundamentales: el medioambiental y el ocupacional. Según Garcia, «urge controlar los vertidos irregulares para frenar la filtración de nitratos que contamina el subsuelo y los acuíferos que finalmente proveen de agua los campos».
Además, añade que «hay que reforzar la colaboración con la Unió para poner en práctica proyectos de aprovechamiento de los subproductos del sector primario y hacer una apuesta por los fertilizantes orgánicos».
