La Generalitat ha resuelto finalmente la adjudicación del contrato de los servicios de transporte escolar en la Comunitat Valenciana, que ha venido precedida por un importante número de quejas y recursos que han afectado especialmente a la provincia alicantina y, en mucho menor medida, a Valencia y Castellón. Finalmente, el Consell ha decidido sacar este servicio y hacerlo por lotes, de tal manera que en el caso de la provincia de Castellón ha ido a parar a una unión temporal de empresas con la participación de prácticamente todas las empresas de la provincia.

Esta agrupación empresarial se encargará del transporte escolar en un clima que dista mucho del que se ha dado en la provincia alicantina, en la que al final este reparto por lotes ha tratado de igualar las posiciones de las principales empresas que pujaban por el servicio con una demostración de gran rivalidad.