El Gobierno no prevé dotar a Castellón de más examinadores de Tráfico. El subdelegado en Valencia y delegado en funciones, José Vicente Herrera, descarta un aumento de la plantilla de funcionarios que descongestione la difícil situación que vive la provincia, con 1.500 alumnos en espera para afrontar el práctico de conducir y unos 120 exámenes cancelados a la semana debido a la huelga de examinadores, que comenzó a finales de junio.

Herrera se reunió ayer con los representantes de las asociaciones de autoescuelas de la Comunitat y, aunque escuchó sus reivindicaciones, se limitó a recordar la convocatoria de 500 plazas que la DGT anuncia para este año (solo 70 de ellas son de acceso libre y las 435 restantes son para promoción interna). El presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Castellón, Antonio Pertegaz, critica que desde la Delegación del Gobierno pasen la pelota a los examinadores y tilda el encuentro de «estéril» y «frustrante». «Nos dijeron que solucionar el problema no está en sus manos, poniendo toda la responsabilidad a los funcionarios», relata Pertegaz, que culpa al Gobierno central «de todo lo que está pasando» y puntualiza que «la situación debe desbloquearse desde Madrid, aunque lo nieguen», puntualiza.

Y es que, tal y como viene relatando Mediterráneo, la situación está totalmente colapsada en Castellón, que ya ha protagonizado una multitudinaria concentración de protesta frente a la Subdelegación del Gobierno. Los paros, que se han venido realizando tres días por semana, concluyeron ayer, puesto que el mes de agosto es inhábil. Sin embargo, el sindicato de examinadores Asextra amenaza con continuar con la huelga en septiembre, convirtiéndola en indefinida y agravando la situación de Castellón.