Castellón ha vivido este fin de semana la séptima gran recogida de alimentos en los supermercados de la mayoría de localidades de la provincia. En la iniciativa han colaborado 40 entidades benéficas, con unos 2.000 voluntarios, que se han encargado de recoger la comida donada por los clientes de los establecimientos.

Una de las aportaciones más cuantiosas es la que ha efectuado Mercadona, con una donación de 16.000 kilogramos de yogures para repartir entre todas las asociaciones. Desde el Banco de Alimentos de Castellón agradecehn la colaboración de entidades y particulares en esta gran recogida, en la que han sido muchos los que han aportado productos no perecederos, como aceite, leche, azúcar, cacao en polvo, cereales, galletas, pañales, alimentos infantiles, conservas y legumbres.

El objetivo de esta edición es poder recaudar 250.000 kilogramos de comida «para ayudar a las miles de personas que, todavía hoy, viven en situación de precariedad alimentaria». El presidente del Banco de Alimentos de Castelló, Santiago Miralles, agradeció la gran colaboración y explicó que ahora se clasificarán todos los productos para ser repartidos entre las diferentes entidades que atienden a aquellas personas con menos recursos.

El Banco de Alimentos, una asociación sin ánimo de lucro y aconfesional, y los colectivos a las que beneficia ayudaron a casi 15.000 personas en el 2018.