¿Hay horario continuo o jornada partida? ¿Qué nivel de inglés --buscan el avanzado sobre todo- tiene el centro dentro del nuevo plan plurilingüe que arranca este curso? Son las dos preguntas clave en el arranque del proceso de matriculación escolar de Infantil y Primaria que arrancó ayer en los 240 colegios e institutos públicos y concertados de Castellón. Los recursos del centro, como el comedor, la escola matinera y las extraescolares, repiten un año más entre las dudas más consultadas por las familias, según la presidenta de la Asociación de Directores de Infantil y Primaria (ADIP) de Castellón y la Comunitat, Eva Aparici, y máxima responsable del colegio Botànic Calduch de Vila-real.

Sin largas colas, con muchas citas previas dadas, con el cálculo de las plazas pendiente de la bajada de la ratio de alumnos por aula de 25 a 23 en Castellón, Vila-real, Burriana y Nules, y colegios que despuntan en la demanda desde el primer día. Es la foto fija de la primera jornada de la admisión, que finalizará el próximo lunes, día 29, con el cierre del plazo de entrega de sobres, para iniciar la baremación, hasta el 8 de junio, cuando se publicarán las listas definitivas.

«Este año hay pocos cambios con respecto al anterior, sin variaciones en la puntuación, que incide en la importancia de ir a la escuela del barrio, por la proximidad del domicilio que, junto con el hecho de tener hermanos mayores en el centro, son determinantes», señala Aparici, que pone el acento en que «las familias preguntan, y mucho, para decidir en qué colegio matriculan a sus hijos». «Es una decisión importante», señala la castellonense Carla Pérez, que ayer entregó la solicitud en el Estepar, su primera opción.

PRESENCIAL //

Este año, como el pasado, las familias elegirán entre 10 opciones, «y tendrán la misma puntuación para la primera y la última». Anteriormente, si un niño no entraba en su primera elección, pasaba a la cola de la segunda, y así sucesivamente. Y aunque de «una manera muy minoritaria», empieza a notarse la matrícula on line, aunque «los padres prefieren ir al propio centro, para preguntar y dar en mano la documentación», según apunta Alfredo Mercé, director del Gaetà Huguet de la capital.

ALTA DEMANDA //

En este centro, por ejemplo, ayer ya se registraron 65 solicitudes para 43 plazas. En la misma línea están el Sanchis Yago, el Manel Garcia Grau o el Vicent Marzà en Castellón, o el José Soriano en Vila-real, que, junto a los concertados de Madre Vedruna y la Consolación de Castellón y Benicarló están entre los más buscados por las familias durante los últimos años. «La demanda es alta», señaló Mercé.

En Castellón, por ejemplo, este curso se han reestructurado las zonas de influencia, «para que cada barrio tenga todas las opciones posibles, jornada continua y partida, oferta pública y concertada», según el concejal de Educación, Enric Porcar, tras la liquidación del distrito único. Y se notan ya los primeros trasvases de alumnos por la jornada continua, a favor y en contra . Uno de los casos, el de una familia que ha pedido plaza en el colegio Ejército, que tiene horario único.

ZONAS RURALES //

En las zonas rurales, el foco está puesto en Villahermosa, Cortes, Castellnovo, Torre Endoménech, Rossell, Soneja y Portell, cuyas aulas penden de un hilo, después de que la Conselleria aceptara las alegaciones. Si hay suficiente matriculación, se mantendrán; si no, se cerrarán, y los niños se derivarán a centros de municipios cercanos. Aparici tiene «esperanzas» en el plan de choque de Educación, al impulsar más aulas de 2 años en Benassal, Llucena y Albocàsser, que se suman a Vilafamés, y una nueva escuela infantil en Benlloch.