El Ministerio de Sanidad lo dijo ayer. Todos los esfuerzos están ahora puestos en disponer de suficientes unidades de cuidados intensivos (UCI) para atender a los pacientes graves. El llamado pico de la epidemia se da casi por alcanzado a nivel nacional, pero preocupa, y mucho, no disponer de suficientes camas para críticos, todas ellas con respiradores, teniendo en cuenta que algunos de los enfermos por coronavirus ingresados pueden empeorar en los próximos días y requerir pasar a esta unidad.

El objetivo es que los facultativos no tengan que llegar a la tesitura de elegir a qué pacientes se ingresa en la UCI y a quiénes no. De ahí que la Comunitat, que va en cuanto al avance de la epidemia cerca de una semana por detrás de Madrid, se esté preparando para ello, para evitar el colapso que allí se está dando. De hecho, en los últimos días, los hospitales públicos de la provincia han doblado su capacidad en las UCI, rozando las 80 camas, habilitando espacios dentro de los centros para estos pacientes.

Por ejemplo, la situación más crítica, debido a que se trata de un hospital comarcal, está en Vinaròs. Allí había siete camas y han ampliado con seis más en la antigua zona de rehabilitación. En el Hospital General de Castelló, el de referencia para toda la provincia, había 18 y ahora han sumado 16 puestos nuevos creados en la zona de quirófanos y endoscopias, mientras que en la Plana han pasado de nueve a 18. Por su parte, en el Provincial, a las seis existentes han sumado cinco nuevas en la unidad de cirugías sin ingreso, que destinan a las personas no infectadas.

El hospital que resta, el de la Magdalena, es territorio libre de covid-19, al no atender a ningún infectado para evitar posibles contagios entre los pacientes vulnerables allí ingresados.

«UCI autonómica» // Todos estos espacios cuentan con respiradores y todavía hay camas libres para poder hacer frente a un posible pico de pacientes que empeoran. Sanidad no da el dato de disponibilidad por provincias porque asegura que los cuidados intensivos se están tratando como si fuera una «UCI autonómica» y cuando se requiere el traslado de un paciente a otro centro se hace como si la Comunitat «tuviera un gran hospital» donde usan «todos los recursos disponibles».