Iberdrola celebró el Día Internacional del Voluntariado con acciones en seis de los países en los que la compañía está presente. En Castelló, la empresa energética apostó por una propuesta que combinó los valores ambiental y social. Empleados de la provincia se desplazaron hasta el paraje natural del ermitorio de la Magdalena, donde realizaron actuaciones de mejora que consistieron en la creación de un espacio para usos recreativos, con mobiliario integrado en el entorno. Asimismo, en la zona cercana también hicieron labores de reforestación con varias especies autóctonas del Desert de les Palmes.

En esta edición de la jornada de voluntariado, que la empresa realiza de forma ininterrumpida desde el año 2006, los asistentes trabajaron durante toda la mañana codo con codo con los miembros de la Fundación Síndrome de Down de Castellón, que también demostraron su habilidad para las tareas de jardinería.

En España, más de 800 voluntarios de la compañía participaron en 26 actividades, en 24 ciudades de 13 comunidades autónomas. Hubo actuaciones en Madrid, País Vasco, Castilla-la Mancha, Cataluña, Galicia, Castilla y León, Murcia, Navarra, la Rioja, Cantabria, Andalucía y Extremadura, además de la Comunitat, donde la energética también limpió la playa Moncayo, ubicada en Guardamar del Segura y afectada por la gota fría.

La compañía reunió a 2.200 voluntarios en seis de los países en los que más actividad empresarial desarrolla. Además de España, hubo acciones de voluntariado en Reino Unido, Estados Unidos, México, Brasil y Portugal, donde la firma se estrenó.

Bajo el lema ¡Juntos construimos el mundo que queremos!, Iberdrola dedicó esta jornada a la lucha contra el cambio climático.