El Ayuntamiento de Castelló inició ayer los trámites, con algunas semanas de demora frente a las previsiones iniciales, para la aprobación del reglamento del transporte público urbano que incluye el texto y las normas que deberán cumplir los usuarios del patinete eléctrico en la capital de la Plana. La comisión de Estudio de Sostenibilidad y Ordenación del Territorio informó ayer favorablemente sobre el sometimiento de este texto a consulta pública previa en la que la ciudadanía podrá presentar propuestas.

La próxima gestión será someterlo de nuevo a la comisión de gobierno para su visto bueno, aprobarse en la junta de gobierno local y, finalmente, será el pleno el que dé el visto bueno a la ordenanza sin que, por el momento, tenga fecha de entrada en vigor. Recoge las sanciones que se impondrán a los usuarios de patinetes eléctricos que no cumplan con la norma y que oscilan entre los 750 y los 3.000 euros dependiendo si la infracción es leve, grave o muy grave. El documento, que engloba un total de 173 artículos, reglamenta tanto el uso del patinete eléctrico, el transporte de mascotas en las bicicletas, sin olvidar normas para las zonas de carga y descarga, la circulación de bicicletas, motos y ciclomotores así como vehículos pesados o las tarjetas de estacionamiento para aquellas personas con movilidad reducida, según adelantó este diario.