La provincia de Castellón experimenta la mayor subida de población en los últimos diez años y lo hace gracias a los flujos migratorios. A pesar de que el año pasado el crecimiento vegetativo fue negativo, al superar las muertes a los nacimientos, ha ganado casi dos mil habitantes.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Castellón tenía, a 1 de enero del 2019, un total de 571.495 habitantes, lo que supone 1.919 ciudadanos más, es decir, un +0,33%. Puede parecer poco en términos porcentuales, pero hay que tener en cuenta que en los últimos años la curva poblacional tendía a menguar (ver cuadro).

Pero ¿por qué se ha producido esta remontada si los nacimientos han disminuido (-216) y las muertes han aumentado (+300), superando las defunciones (5.593) a los nacimientos (4.569) en más de un millar?

INMIGRACIÓN // El motivo ha sido el saldo migratorio positivo, fruto de que hubo más entradas que salidas de habitantes. En concreto, el exterior arrojó un flujo de +1.603, ya que a pesar de que 4.970 empadronados en la provincia abandonaron el país rumbo al extranjero el año pasado, vinieron un total de 6.573.

Tres nacionalidades destacan por sus aportaciones en la provincia de Castellón. Son los marroquís, que arrojan un saldo positivo de +606, los colombianos (+561) y los venezolanos (+367).

En cambio, españoles y rumanos siguen saliendo más del país que entrando, como lo prueba que ambas nacionalidades se queden en signo negativo (con -175 y -950, respectivamente).

El saldo migratorio entre provincias es positivo también para Castellón, con +1.351 en 2018.

La provincia no es una isla. Si se pone el foco en la Comunitat Valenciana, creció el año pasado un 0,57%, dos centésimas por debajo de la media española. Sin embargo, no pudo llegar a la barrera psicológica de los cinco millones de habitantes (se quedó con 4.974.475). En cuanto al saldo migratorio exterior a nivel autonómico, arrojó un resultado positivo (+32.054), mientras el interior se situó en 3.728 personas. Además, perdió hasta 7.417 personas nacidas en su territorio.

NATALIDAD // La emigración sigue siendo la única solución a la caída incesante de la natalidad, que en el conjunto del país ha disminuido un 30% en la última década, idéntico porcentaje al de la provincia de Castellón.

La llegada de inmigrantes a España en el 2018 compensó el aumento de las defunciones y la caída de la natalidad e hizo que se registrase el mayor aumento poblacional desde el 2008 (276.186 personas más), llegando a 46,93 millones de habitantes.