Una de las cuestiones que causó debate en el pleno de la Diputación celebrado ayer fue la moción del PP para «pedir al Consell que reduzca su discriminación contra Castellón», que salió adelante con los votos del PP y Ciudadanos.

Vicent Sales señaló en este punto que la solicitud se apoya en que los presupuestos del Estado incluyen un plus de financiación para el Consell de 851 millones, extremo que negaron desde la oposición, que atribuye este dinero a deudas pendientes. «La apuesta del Gobierno por la Comunitat es tal, que elevará sus transferencias un 9,5% más, frente a la subida media nacional del 5,7%», añadió el portavoz popular.

Por su parte, el síndico socialista, José Benlloch, calificó de moción vacuna el texto presentado por el Partido Popular, al tiempo que aseguró que «lo único que pretenden Javier Moliner y Vicent Sales con esta moción es distorsionar la realidad y así desinformar a la sociedad».

Desde el punto de vista de Benlloch, esos 851 millones corresponden a atrasos de 2015 y 2016, y son necesarios, dijo, para pagar a proveedores. Añadió que los populares «falsean los datos» para «atacar el Consell», y «esconder la deuda de 44.000 millones que han dejado» los populares.