Los alcaldes de Castellón, Vila-real, l’Alcora y Onda, así como la Diputación y la Conselleria de Economía, mostraron ayer su respaldo al azulejo castellonense en su petición a la Unión Europea para que no conceda a China la condición de economía de mercado, lo que supondría la eliminación de las barreras arancelarias y la llegada de productos de ese país a los mercados de las firmas provinciales en condiciones de dumping --competencia desleal--.

Las instituciones públicas se sitúan así en línea con la posición de los sindicatos mayoritarios del sector, UGT y CCOO, que hoy firman el manifiesto de ámbito europeo al que ya se adhirió la patronal azulejera Ascer en el 2015, para reclamar que no se liberalicen las relaciones comerciales con el gigante chino, como informó Mediterráneo.

La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, valoró que “las consecuencias pueden ser graves para un sector como el azulejero, que ya ha sufrido los efectos de la crisis y aún está en situación de fragilidad”. Marco añadió que observan “con preocupación la posible incidencia en la destrucción de empleo y las inversiones industriales”, y ve la situación con “mucha inquietud”.

Por su parte, el primer edil de Vila-real, José Benlloch, dijo: “No estamos en contra de la libre competencia y del comercio internacional, pero sí a favor de la igualdad de condiciones”. Benlloch aseguró que “el sector cerámico sabe que puede contar con el Ayuntamiento de Vila-real para todo lo que este en nuestra mano”.

Desde Onda, el alcalde de la población, Ximo Huguet, se situó “en contra del libre mercado de China en la UE, pues supone un grave perjuicio para el sector azulejo”, y dijo apoyar “en todo momento las reivindicaciones del sector del azulejo”, por lo que suscribirán “el documento”.

Por su parte, el alcalde de l’Alcora y diputado autonómico, Víctor Garcia, mostró su preocupación y recordó que el municipio ya ha aprobado por unanimidad una moción en la que se pide instar a la UE a no abrir las puertas a China. Garcia ha presentado en Les Corts una iniciativa en el mismo sentido que se debatirá durante los próximos meses.

Desde la Diputación, Salvador Aguilella reiteró la postura de la institución en el sentido de “defender las oportunidades de nuestros productos en igualdad de condiciones a los que llegan de otras zonas del mundo”.

Por último, desde la Conselleria de Economía, que dirige Rafael Climent, indicaron que “la idea es adherirse para la defensa del azulejo, y de todos los sectores, pero debería ser una decisión genérica del Consell”. H