Un grupo de entidades internacionales de gran prestigio en el ámbito del hábitat --entre las que se encuentra el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC) de Castellón-- y que participan en el proyecto europeo Katch-e ha logrado la máxima puntuación de las iniciativas que se habían presentado al programa Erasmus+. Se trata de un consorcio empresarial vinculado a los materiales de construcción, tanto portuguesas, austriacas, como danesas.

El propósito es desarrollar a lo largo de los próximos tres años diversos productos y servicios bajo la perspectiva de la economía circular, un nuevo concepto que desarrolla estrategias que tienen por objeto reducir tanto la entrada de los materiales como la producción de desechos, tratando siempre de cerrar procesos que sean más sostenibles y respetuosos con el medio ambiente.