La directora general de Justicia de la Generalitat valenciana, la magistrada Àngels Garcia Vidal, anunció ayer que la Conselleria va a cambiar en los próximos meses “todos los ordenadores de los juzgados de Castellón”. Precisamente, esta semana Mediterráneo se ha hecho eco de las quejas de funcionarios, abogados, procuradores, jueces y fiscales respecto al retraso en la modernización de los sistemas informáticos en aras de eliminar el papel en la justicia.

Garcia Vidal hizo esta promesa durante el foro que se celebró ayer por la tarde en la Casa dels Caragols de la capital y que trató este aspecto. “Estamos cambiando ahora el sistema de gestión procesal de los juzgados, Cicerone, porque es muy antiguo y no se adapta al futuro expediente electrónico”. Y explicó: “El problema es que no se ha hecho nada en muchos años, no se ha invertido. Y nos hemos encontrado con que ni tan siquiera estaba contratada la instalación de los programas”.

En este sentido, el subdirector general de Modernización de la Justicia, Paco Cabo, matizó que el sistema de notificaciones Lexnet, que ahora se ha extendido a abogados y graduados sociales, “aún no permite la presentación de escritos en los juzgados y esto, de momento, se hace en papel”.

Cabe señalar que el complejo proceso responde al ambicioso proyecto de implantación del expediente electrónico que se está llevando a cabo en toda España, auspiciado por el Ministerio de Justicia, para que en el futuro los procedimientos judiciales sean de tramitación electrónica.

UNA JUSTICIA LENTA // El fiscal jefe de Castellón, José Luis Cuesta, se lamentó de que el actual sistema judicial sea “excesivamente lento”, por lo que calificó la implantación del expediente electrónico como “fundamental”. “Las otras comunidades autónomas van más avanzadas, pero nunca es tarde. Llegaremos, tarde, pero llegaremos al objetivo que es eliminar el papel para que la justicia sea rápida, eficiente y eficaz”, razonó, al tiempo que expresó: “No es que tengamos la máquina de escribir Olivetti, pero lo cierto es que, lamentablemente, solo disponemos de un ordenador con pequeñas aplicaciones”.

Al mismo tiempo, Cuesta denunció que, hoy por hoy, los funcionarios de los juzgados y los de la Fiscalía están realizando el trabajo de registro “por duplicado” e imperó por la necesidad de que los fiscales puedan acceder al programa de los jueces (Cicerone) desde sus ordenadores para consultar los expedientes y poder añadir datos propios. Y es que recordó que sus sistemas son actualmente “incompatibles”, y, además, “en cada comunidad son completamente diferentes”.

Ante esta falta de comunicación e intercambio de datos propuso como solución crear “el expediente judicial único en el que la Fiscalía estuviera también integrada”, junto al resto de estamentos, y “pudiera añadir sus datos”.

El secretario coordinador Jerónimo Toledano, afirmó que “no hay alternativa a la revolución tecnológica; la justicia no puede quedarse atrás. Haría falta un programa como el de Hacienda”. H