El proyecto L’escola canta continúa su crecimiento. El programa encara su tercera edición llegando a más alumnos de más escuelas y en más localidades. Gestado hace tres cursos en el Ayuntamiento de Castelló, ha ido reforzando sus vínculos con la conselleria de Educación para expandirse. El curso pasado se sumaron otras poblaciones de las provincias de Castellón y Alicante, y en este se suman de Valencia. En total, más de 7.200 alumnos de Primaria de catorce comarcas, con 132 escuelas de 51 municipios. En el caso de Castellón, 4.600 alumnos de quinto y sexto de Primaria, en 87 escuelas de 36 localidades.

Los números hablan por sí solos del éxito de la iniciativa, que fue presentada ayer en el salón de plenos del consistorio por el edil de Educación Francesc Mezquita y el conseller del ramo Vicent Marzà. En la provincia de Castellón participarán 1.201 alumnos más que el curso pasado, lo que supone un aumento del 35%.

Los objetivos del proyecto, un recurso de innovación educativa centrado en los valores del trabajo en equipo y el desarrollo de competencias en materia plurilingüe, son dar a conocer la tradición musical valenciana y, a la vez, fomentar la convivencia entre diferentes culturas mediante la formación de corales. L’escola canta implica al profesorado de música de los centros escolares, a los ayuntamientos y a las bandas de música de cada municipio. En el caso de Castelló, a finales de mayo, se celebrará un gran concierto en la plaza de Toros.

Cantata // Este curso, el proyecto propone la interpretación de una cantata creada para la ocasión por el compositor Pablo Anglés, con letra de Ximo Montañés. La cantata, titulada El cor de la terra, combina música, canto y dramatización y aborda la temática de la emergencia climática.

Mezquita calificó el programa como «una experiencia fantástica» y destacó lo innovador de la iniciativa, que no deja de crecer e implantarse en más centros. Marzà subrayó, por su parte, que «mediante la música estamos consiguiendo que las comunidades educativas se cohesionen para trabajar diferentes ámbitos educativos y, además, abrimos las puertas de las escuelas y logramos que se sientan partícipes otros colectivos e instituciones, como bandas y municipios».