La directora de la Masía Fuente la Reina y del hotel Luz de Castelló, Eva Roqueta, ya contaba en sus negocios con un protocolo muy similar al publicado ayer por Sanidad para los banquetes que se van organizando. «Las bodas han pasado de la noche al día, al limitarse la fiesta hasta las 1.00 horas, como es el caso de un enlace previsto el 4 de septiembre», relata. Ahora, solo se autoriza el baile oficial de los novios, y punto; y la barra libre de pie se ha optado por sustituirlo por el servicio de las copas en las mesas, separadas y organizadas en grupos de diez, donde los invitados están sentados y disfrutan de música ambiente, en lugar de la orquesta», explicó. El cóctel se sirve «en mesas altas separadas donde están las mismas personas que luego coincidirán en el ágape». Sus amplios espacios al aire libre permiten distancias de sobra y la llegada de invitados es escalonada, en coche individual. «Es otro concepto de bodas al que habrá que acostumbrarse», aseveró.