La Unió de Llauradors y los Comerços de Benicarló, en representación de sus socios, denunciaron ayer la tasa actual de basuras en la zona 1 del Plan Zonal de Residuos (norte de la provincia), que consideran “abusiva” y con cuya valoración no están de acuerdo. Los comercios de Benicarló presentaron ayer en las oficinas que la Diputación tiene en la ciudad una reclamación por cada uno de los comercios que integran la asociación, al estar en desa-cuerdo “con las abusivas tasas de eliminación de residuos del Consorcio”. Alegaron que la mayoría de sus asociados no generan residuos que deban ser tratados en la planta de Cervera, y aseguraron que “los residuos que generamos, como el cartón, no van a dicha planta”.

La asociación también mostró su disconformidad con que la valoración se haga por metros cuadrados y no en función del epígrafe de actividad de cada negocio, pues consideran que “la tasa debería ser una cantidad fija por el tipo de residuo generado”.

La Unió de Llauradors, por su parte, también denunció ayer que los vecinos de los pueblos del Consorcio de Residuos de la zona 1 pagan una tasa de basura “abusiva y mucho más cara de la que se paga en otras zonas de la provincia” sin haber recibido aviso previo del incremento que iba a sufrir este impuesto.

Así mismo, la Unió de Llauradors criticó que, si antes los ciudadanos de la zona 1 pagaban una tasa unificada, “ahora tienen dos impuestos diferentes, uno para el tratamiento y otro para la recogida de las basuras”. La organización denunció que los vecinos pagan una tasa fija de, al menos, 79,50 euros por casa y “sin diferenciar los kilos de basura que produce cada pueblo”.

Además, si se trata de un negocio, el precio es, según afirma La Unió, mayor aún, ya que para locales de hasta 100 m2 se pagan 198,75 euros. “Si hablamos de negocios de 101 a 200 metros, la tasa asciende a 397,501 y si la superficie mide más de 400, los vecinos pagan 715,50”, aseguran.

La organización indica que, a los 79,50 euros de tasa fija, hay que sumar la de recogida. De este modo, en La Jana sus vecinos pagan 31 euros más para casas de dos personas y en Canet lo Roig llegan a pagar hasta 35 euros.

La Unió cuestionó especialmente el proceso a través del que se ha llevado a cabo el incremento de la tasa de basuras, pues los afectados no recibieron información de la subida y denuncian que “muchos recibieron el recibo del banco antes que la notificación” e, incluso, “sin haber autorizado la domiciliación, se les cobró la tasa”.