La demanda de inspecciones se ha disparado en las últimas semanas en las estaciones de ITV de la provincia y esto ha provocado la indignación y el enfado de los usuarios, puesto que las citas previas más cercanas están fechadas para dentro de dos meses. Así, diariamente se crean colas de hasta hora y media de espera para ser atendidos, lo que provoca las quejas de los usuarios, como comprobó este lunes Mediterráneo.

«En verano siempre ha habido colas pero no eran tan grandes como hasta ahora», aseguró el director técnico de la ITV de Castelló, Pablo Ruiz. El director financiero del servicio en Castellón, Pascual Chuan añadió que «hay un aluvión de inspecciones. Es una época complicada». Una situación crítica que desde los propios centros achacan a causas como el nuevo procedimiento de inspección, que consta de pruebas adicionales, y la incapacidad de las estaciones para atender tanta demanda.

Ruiz señaló que la implantación de la norma internacional ISO14020 entorpece la agilidad con la que trabajaban anteriormente los empleados. Este nuevo método consiste en la división de los técnicos según especialidades, por lo que los vehículos ligeros son inspeccionados por unos trabajadores, mientras que otros se dedican a vehículos pesados y a motos, respectivamente.

Cambios legales

Manolo Martí, secretario de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, concide: «Aparte de la ISO14022, el Decreto Ley 920/2017 del 23 de octubre supone inspecciones más exhaustivas y, por tanto, se dedica más tiempo a cada inspección y se retrasan las citas». «En la estación de Castelló estamos dando cita previa para dentro de dos meses», aseguró Ruiz.

Esto causa las quejas de los usuarios, como un vecino de Vila-real. «Tengo un coche al que le caduca la ITV en julio y otro en agosto. Me han dado turno para el 2 de septiembre», dijo. Él, como muchos otros, se expondrá a las sanciones de hasta 200 euros que corresponden a aquellos que circulan teniendo la inspección técnica de vehículos caducada.

«¡Calentito estoy!». Esa era la reacción de Raimundo Badenes, uno de los usuarios que estaba ayer en la ITV de la capital de la Plana, tras estar casi dos horas haciendo cola para ser atendido.

Otros, como Jordi y Juanjo Navajas, vecinos de Castelló y que ya estuvieron la semana pasada pasando la ITV, aseguraron que el viernes estuvieron más de una hora y media esperando. «Ese día tenía cita y estuve esperando todo ese tiempo hasta que me atendieron», indicó Jordi.

Más medios

Ante esta situación, Pascual Chuan se justificó afirmando que se ha contratado más personal. Manolo Martí, por su parte, asegura que se baraja incluso la opción de añadir otra línea en el centro de inspección situado en Vila-real.

A pesar de las medidas --a la vista está que insuficientes--, la Conselleria iniciará en los próximos días inspecciones para comprobar el funcionamiento de la ITV. «Si no se están realizando las prestaciones adecuadas, se llevarán a cabo actuaciones sancionadoras y tendentes a recuperar la normalidad», apuntaron desde el departamento autonómico.