Con los sentimientos a flor de piel, Castelló celebró por todo lo alto el día grande de la Lledonera, que llenó los corazones de cientos de castellonenses, prestos a mostrar la devoción por su querida patrona. Al tradicional vol de l’alba desde el Fadrí, le siguió la misa de comunión general y la pontifical, presidida por el obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López, en la basílica, en una mañana en la que el buen tiempo se alió con el oficio religioso.

La primera fila en el templo la ocuparon representantes festivas y políticas. La alcaldesa de Castelló, Amparo Marco; junto al presidente de la Diputación Provincial, Javier Moliner; las reinas de las fiestas de la Magdalena Natalia Palacio y Natalia Collazos; la presidenta del PPCV, Isabel Bonig y, los diputados autonómicos electos del PP por Castellón Rubén Ibáñez y Beatriz Gascó. Por parte de la corporación municipal también participaron la edila de Gente Mayor, Mary Carmen Ribera; la concejala de Gestión Municipal, Mónica Barabás; el edil de Juventud, José Luis López; y el de Fiestas, Omar Braina; y por la tarde, asistió la concejala de Actividad Económica, Patricia Puerta así como el diputado popular Vicent Sales.

Además, con especial protagonismo, desfilaron en la procesión, precediendo a la Virgen, los tres cargos más antiguos en relación a estos festejos: el procurador y concejal de Ermitas, Enric Porcar; el Clavari 2019 Joan Querol Vicent; y el prior de la Basílica del Lledó, Josep Miquel Francés.

CESIÓN DEL TESTIGO / Un año más, la Real Cofradía del Lledó, presidida por Ramón Vilarroig, cuidó cada detalle para que todo saliera a la perfección. Tras la veneración a la Mareta y la misa vespertina, bajo los pórticos de la Casa Prioral, el plenillo municipal eligió al nuevo Clavari, Lluís Roman Garcia, en sustitución de Joan Querol Vicent; y del Perot, José Manuel Benlliure Pasqual, propietario de tierras en Ramell, y que releva a Rafael Lloret.