El Consejo de Ministros autorizará hoy la licitación de la concesión de las áreas de servicio en la AP-7 en el tramo de la provincia, que revierten al Estado el próximo 1 de enero cuando entre en vigor la liberalización de esta concurrida carretera. En concreto, en Castellón se encuentran tres instalaciones de este tipo, la de Benicarló, la Ribera y la Plana.

La modalidad de contrato será concesión de servicios por un plazo de cinco años, cuyo objeto será la conservación y explotación de las instalaciones existentes junto con la ejecución de las operaciones de reforma y mejora que propongan los adjudicatarios en sus ofertas. La explotación de las áreas de servicio devengará el correspondiente pago de un canon anual a favor de la Administración General del Estado.

En el caso del área de servicio de Benicarló, el valor estimado del contrato será de 24,2 millones de euros, con un canon de 407.151 euros. El de las instalaciones de la Ribera se cifra en 23,5 millones, con un pago anual de 256.287 euros, mientras que la de la Plana tendrá un contrato de 24,3 millones de euros, con una tasa de 344.079 euros al año.

La cuantía estimada del contrato está calculada como importe neto de la cifra de negocios que se estima generará la empresa concesionaria durante la ejecución del mismo. Y es que estas instalaciones cuentan ahora con numerosos clientes debido a que se encuentran dentro de la AP-7, una vía muy empleada para realizar largos recorridos, por tanto, los conductores no abandonan la carretera para sus descansos.