Tras unas jornadas marcadas por las elevadas temperaturas, ayer regresó la inestabilidad propia de la primavera y nuevas tormentas -- acompañadas de aparato eléctrico y, en algunas zonas, granizo-- recorrieron a partir del mediodía Castellón. Y las lluvias continuarán hoy en la provincia. La Agencia Estatal de Meteorología había decretado la alerta naranja en el litoral e interior sur y el aviso amarillo en el norte de la provincia ante la posibilidad de precipitaciones que podían llegar en el sur a 40 litros por metro cuadrado en una hora y de 20, en el norte. Y las precipitaciones no faltaron. No obstante, las tormentas fueron cortas e intermitentes pero intensas, con mucho aparato eléctrico, como en la capital de la Plana, Burriana, Vall d’Alba, Atzaneta y la Vall d’Uixó, si bien al cierre de esta edición no se había producido incidencias reseñables, los efectivos del Consorcio Provincial no habían realizado ningún servicio relacionado con el agua, ni se registraron inundaciones importantes en el litoral como las de finales de marzo en Almassora y Burriana.

Así, los registros más altos (hasta las 19.30 horas) fueron los 31,6 l/m2 de Vall d’Alba; los 25,4, de Castellfort; los 23,8, de la zona de Castellón y Almassora; los 22,8, de la Serra d’en Galceran; o los 15,6, de Atzeneta. Las tormentas primaverales también hicieron acto de presencia en Els Ports con precipitaciones que durante algunos minutos fueron muy intensas. En Morella se acumularon más de 20 l/m2; en Portell fueron más de 15; en Cinctorres, 13,5; y en Vallibona, 14.

No obstante, la peor parte se la llevaron las zonas de Borriol y Artana, donde la granizada causó diversos daños en los olivos, almendros y cítricos, según explicó el secretario general de la Unió de Llauradors, Carles Peris.

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LUNES

8 DE JUNIO DEL 2020