Las patronales del ocio nocturno de toda España se han unido para reclamar al Gobierno central una modificación de la ley antitabaco que permita fumar en las discotecas, en zonas separadas. Una reivindicación a la que también se suma Castellón, según defendió ayer el representante de la división de ocio nocturno de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Castellón (Ashotur), José Luis Selma. “Desde Castellón también suscribimos la petición de que modifiquen la ley. Cuando se cumple un año de su entrada en vigor, el balance es que nos ha afectado en negativo, y mucho. Se han cerrado locales y perdido empleos; y también ha bajado la venta en las barras”, señaló Selma. Punto que suscribió otro empresario del sector, Diego Cuevas, quien explicó que los fumadores “salen más a la calle y pasan más tiempo fuera de la sala”.

Asimismo, ambos defendieron que los empresarios ya tienen hechas inversiones en los locales con zonas separadas y acondicionadas para los fumadores, por lo que no habría costes adicionales.

ARGUMENTOS // ¿Por qué el colectivo empresarial de los pubs, discotecas y locales de música en directo reclaman un tratamiento especial y diferenciado frente a bares y restaurantes, dentro de la ley antitabaco? Desde el sector nacional consideran que “en el caso de la noche, la modificación de la ley antitabaco es absolutamente compatible con la defensa de la salud pública y la firme lucha contra el tabaquismo”.

Al respecto, alegan que “en los locales de ocio nocturno tienen prohibida la entrada los menores de 18 años de edad, por lo que la imprescindible protección al menor frente a la amenaza del tabaco está garantizada”.

En segundo lugar, valoran que “en el ocio nocturno no existe ninguna incompatibilidad higiénica ni sanitaria por no existir ningún tipo de manipulación ni consumo de alimentos”.

Asimismo, para estos empresarios “el funcionamiento de los locales de ocio, en la que el público acude a las barras para retirar sus consumiciones y circula libremente por todo el establecimiento, sería muy sencillo utilizar las diferentes salas o espacios de los que disponen la mayoría de locales, habilitando alguna de ellas como cabinas zonas para fumar sin presencia de trabajadores. Así se garantiza la calidad del aire y no se perjudica al turismo”. H