La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, declinó ayer valorar el funcionamiento de una institución ajena al Ayuntamiento como es la Subdelegación del Gobierno, y con ello la presunta trama de facturas irregulares y el supuesto mal uso del dinero electoral, que afectaría a la etapa del exconcejal socialista Antonio Lorenzo como subdelegado.

«Lo que tengo que hacer como alcaldesa es valorar las cosas del Ayuntamiento, no de una institución que no conozco», indicó, para matizar que «la justicia hablará». Sí que volvió a alabar la decisión de Lorenzo de dimitir, actuando «con una ejemplaridad total», manifestó Marco, al igual que la portavoz adjunta del grupo socialista, Patricia Puerta. Para el próximo lunes, 11 de febrero, han convocado un pleno extraordinario, a las 13.00 horas, en el que se tomará conocimiento de la renuncia de Lorenzo. Su sustituta, Monica Barabas, entrará en el pleno de febrero.