La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, explicó ayer que convocará en los próximos días el pleno extraordinario solicitado por el PP en el que pide una comisión de investigación sobre presuntas irregularidades en contrataciones del ya exconcejal socialista Toni Lorenzo, porque no tiene «nada que esconder». «Siempre he dado la cara y si lo que quiere el PP es un debate político conmigo, lo va a tener», dijo. Matizó que el grupo municipal popular, y el resto de la corporación, han tenido acceso a los expedientes de las contrataciones de las que ahora dudan, como el Centro de Emergencias, los chalecos para la Policía Local o la selección del director de la Banda de Música, en las comisiones.
Sobre el rechazo a la comparecencia en el pleno de mañana a instancias también del PP, para dar explicaciones sobre la dimisión de Lorenzo, la alcaldesa aseguró que se desestimó por dos razones. «Una, porque no tiene sentido que yo dé explicaciones sobre la gestión de otra administración pública, en este caso la Subdelegación, donde ni he sido, ni soy, ni quiero ser subdelegada». «Y dos, porque la petición se basaba en una mentira. Se decía que yo ya sabía que Lorenzo sería citado a declarar ante el juez cuando dimitió el 1 de febrero, pero lo cierto es que no lo supe hasta el 6 de febrero cuando me lo comunicó Lorenzo (un día antes de que saltará a la luz pública)», detalló. «El acta de concejal es personal y Lorenzo renunció a ella. Hay que pedir explicaciones a quien toque, pero no a mí», destacó.
