Los alumnos matriculados en estudios universitarios en la Comunitat el próximo curso podrán beneficiarse de una nueva modalidad de ayuda, pionera en el Estado, cuyo beneficiario tendrá un salario de hasta 600 euros mensuales por curso. Así lo anunció ayer el conseller de Educación, Vicent Marzà, quien, junto al secretario autonómico de Educación, Miguel Soler, presentó el programa de ayudas para el curso 2016/17.
Este incluye ocho tipos de subvenciones --cuatro nuevas: becas salario, no abandono, formación a distancia y en idiomas-- e implicará casi un 40% más de fondos económicos que el año anterior, hasta 23 millones. La mayor parte se convocará entre mayo y junio del presente año.
La principal novedad son las becas salario, destinadas a alumnado cuyas familias no puedan afrontar los gastos derivados de sus estudios superiores, al margen de la exención de matrícula.
El estudiante podrá colaborar con su familia aportando un sueldo próximo al salario mínimo interprofesional de hasta 600 euros durante los cuatro años de formación, si supera académicamente los cursos. La Generalitat ha consignado a ellas 5 millones de euros y se estima que se beneficiarán mil estudiantes. La nota mínima será inferior a la exigida por el Ministerio de 5,5 a 5 y el umbral de renta de hasta 18.000 € para familias de 4 miembros.
Marzà destacó que las nuevas becas tienen “un marcado acento del Acord del Botànic” y ha hablado de una “generación del Botànic” que podrá concluir sus estudios con las becas-salario. H
