Más de 17.000 denuncias por violencia de género en 10 años. Es el balance de la lacra del terrorismo machista en la provincia de Castellón desde el 2009 al 2019, según los datos del Observatorio contra la Violencia de Género. En el primer semestre del ejercicio 2019, son 838, cifras similares al año pasado, con 844 de enero a junio del 2018.

Sin embargo, una de cada diez mujeres renuncia a declarar contra su agresor. Y la tasa se mantiene en cifras similares en los dos últimos años. Por ejemplo, en el 2018, cuando hubo 1.751 denuncias, 201 féminas se acogieron a su derecho a no testificar. En el 2017 fueron 225 de 1.878.

¿POR QUÉ NO DENUNCIAN? // De las atendidas en los centros mujer 24 horas de Castelló el año pasado algo menos de la mitad no presentaron denuncia. De 525 no denunciaron 256 frente a 269 que sí lo hicieron. La media a nivel autonómico es del 36,2%.

Pero, ¿qué frena a las víctimas? Desde la Conselleria de Justicia explican que las causas más frecuentes son «la carencia de una red de apoyo y familiar, la dependencia emocional y la económica, el miedo a posibles represalias o temor por su seguridad. También se dan muchas búsquedas de explicaciones del comportamiento del agresor y dolor emocional. Preocupación por su futuro y el de sus hijos e hijas y minimización del daño sufrido».

Tres de cada cuatro mujeres atendidas el año pasado en los centros Mujer 24 horas de la Conselleria de la provincia tenían hijos a su cargo y solo un 44% contaba con trabajo remunerado.

PROFESIONALES // De ahí la importancia de contar con profesionales bien formados y con recursos que las acompañen durante el proceso, tanto ayudándolas a aflorar su historia de maltrato así como en el proceso posterior. La Conselleria de Justicia dispone de una red de oficinas de ayuda a las víctimas del delito (OAVD). Si en el 2018, en la provincia se aperturaron 2.994 expedientes, casi el 50% (1.487) era de víctimas de violencia de género. La mayoría son atendidas en el marco de un procedimiento judicial.

Maltrato físico, (empujones, patadas, zarandeos, golpes) y psíquico (vejaciones, insultos, control, intimidación y maltrato sexual, no siempre verbalizado o identificado por las víctimas como maltrato) era la casuística que afloraba en las oficinas de ayuda a las víctimas. La Conselleria de Justicia tiene previsto abrir en los próximos meses dos oficinas más: una en Nules y otra en Segorbe. De esta forma, los cinco partidos judiciales de la provincia contarán con una. Ahora mismo estas están en los juzgados de Castelló, Vila-real y Vinaròs.

Por lo que respecta a centros Mujer 24 horas, al que existía en la capital de la Plana se suman otros abiertos este mismo año en Segorbe y Sant Mateu, desde donde ofrecen un servicio itinerante de prevención y atención a la violencia de género en las zonas rurales de interior que están más alejadas de las capitales y de la zona costera, según la Conselleria de Igualdad. También disponen de recursos residenciales, con 20 restantes en dos viviendas tuteladas en Castellón.

NO ESTÁN SOLAS // El objetivo del Consell con sus dos últimas campañas de concienciación es implicar a toda la sociedad en la lucha contra esta lacra. La de este año utiliza a los jóvenes, reforzando su comportamiento positivo hacia actitudes igualitarias.

Según los datos de la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, en la provincia hay ahora hasta 15 mujeres en riesgo alto y una extremo, además de 284 medio y 1.580 bajo.