El consumo de alcohol y/o drogas al volante provocó la tramitación de un total de 27.176 denuncias en la Comunitat Valenciana en 2018, lo que supone un incremento del 16,45% en relación al año anterior. En la provincia de Castellón se gestionaron 3.044, según informó ayer el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Fulgencio, quien afirmó que dos de cada tres delitos contra la seguridad vial están relacionados directamente con el consumo de estas sustancias.

Fulgencio visitó uno de los controles de la Dirección General de Tráfico (DGT) para la campaña especial sobre control de consumo de alcohol y drogas que se desarrolla en la Comunitat Valenciana hasta el 9 de junio. En esta iniciativa colabora la asociación de personas con lesión medular y otras discapacidades físicas, Aspaym, para concienciar a los conductores sobre las consecuencias que pueden llegar a tener dichas conductas al volante.

El delegado recordó que la ingesta de estas sustancias «puede multiplicar hasta por 15 el riesgo a sufrir un accidente» y destacó que, incluso con tasas de alcoholemia dentro de los márgenes legales, el riesgo de accidente puede verse incrementado. Desde la Delegación informaron de que en la campaña desarrollada entre el 10 y el 16 de diciembre del 2018 se efectuaron 1.607 pruebas de alcoholemia en Castellón, de las que 21 dieron positivo, y 34 de drogas, con 13.