Un test rápido: ¿Cuántas alcaldesas le vienen de sopetón a la cabeza? ¿Y cuántas médicos? ¿Y a cuántas arquitectas conoce? ¿Y autónomas? Seguro que a muchas. Porque haberlas las hay, y cada vez más. Y son más porque en las últimas décadas el peso de la mujer en la economía y en la política ha cambiado radicalmente. También en Castellón. La mujer ya representa el 44,4% de la fuerza laboral y una treintena de los 135 ayuntamientos de la provincia están en manos femeninas. La subdelegada del Gobierno también es mujer. Y la rectora de la UJI. Y la directora del puerto. Y la presidenta de la Cámara de Comercio... Y otro apunte: de cada diez negocios que se abrieron el año pasado, ocho fueron gracias a la iniciativa femenina. Ellas emprenden más.

Ana Lidón Hernández, Alina Ciobanu y Elisa Zaragoza son algunas de las mujeres emprendedoras de Castellón. Son sus propias jefas y nadie les tiene que explicar lo dura que puede llegar a ser la vida de una autónoma. Tienen prohibido ponerse enfermas y sus vacaciones duran menos que las de un trabajador por cuenta ajena. Es lo que hay. «Es complicado, pero al final siempre llegamos a todo, siempre podemos con todo», resume Ana Hernández, copropietaria de un salón de peluquería en el centro de Castellón.

Elisa Zaragoza, Alina Ciobanu y Ana Lidón Hernández:

Las mujeres que emprenden ya son una mayoría como también lo son las que se dedican a la medicina. En los últimos años han tomado las facultades y eso se ha traducido en una presencia masiva en hospitales, ambulatorios y centros de salud. Un ejemplo. De los 2.633 colegiados con los que cuenta el Colegio de Médicos de Castellón, 1.369 son mujeres, el 51,9%. «Esa cifra incluye los profesionales que están jubilados, que son mayoritariamente hombres. Si nos limitáramos solo a los médicos que están en activo el porcentaje aún sería más alto», cuenta Francisca Valcuelde, médico, jefa del Departamento de Dermatología del Hospital Universitario la Plana de Vila-real y una de las vicepresidentas del Colegio de Médicos. «Esta es una profesión muy bonita pero también muy dura. Es dura porque mantienes una lucha continua por un trabajo que requiere muchísimas horas de dedicación, con muchas guardias, y donde la conciliación resulta complicada», resume la doctora Valcuende.

Francisca Valcuende:

MAYORÍA EN LA JUDICATURA

La mujer en Castellón es mayoría en la profesión médica y en la judicatura ocurre algo muy similar. Las diferencias son, incluso, más elevadas. Lo sabe bien la magistrada Eloísa Gómez, presidenta de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial. Gómez tomó posesión como jueza el 1 de febrero de 1979 y recuerda que en su promoción eran 33 hombres y 3 mujeres. Hoy, casi 40 años después, las tornas han cambiado y en la ciudad de Castellón las juezas ganan por goleada. «De los 30 jueces y magistrados de la capital, 23 son mujeres y 7 son hombres y, en las fiscalía, la mujer también es superior», dice.

Eloísa Gómez:

La justicia en Castellón tiene nombre de mujer (otra cosa es la cúpula judicial, donde en España ellas todavía son una clara minoría) y donde cada vez la presencia femenina es más elevada es en la arquitectura. En la provincia, el 30% de los profesionales que forman parte del Colegio de Arquitectos son mujeres, aunque su peso crece hasta el 48% si solo se tiene en cuenta el número de arquitectos que lleva menos de 10 años colegiado. «La presencia de la mujer crece y, además, tenemos muchísimo que aportar», explica Patricia Huedo, que dirige su propio despacho de arquitectura.

Patricia Huedo:

La ciencia y la investigación, sin embargo, sigue siendo para muchas una carrera de obstáculos. No es el caso de Amelia Simó, catedrática del área de Estadística e Investigación Operativa y directora de l’Escola Superior de Tecnologies de la UJI. «La ciencia no tiene género. Hombres y mujeres tienen las mismas capacidades. Pero la educación recibida, los medios de comunicación, la sociedad y los referentes pasados, junto al hecho de que una pequeña parte de la sociedad todavía nos infravalora, hace que el papel de la mujer en la ciencia todavía se minoritario», dice.

Amelia Simó:

Que las mujeres hayan escalado posiciones en sectores como la medicina, la judicatura, la docencia o la arquitectura no significa que la brecha ya no exista. Sigue ahí y la prueba es que el salario medio de los hombres es casi un 20% superior al de las mujeres. En Castellón, ellos declaran unos ingresos medios de 20.760 euros anuales. Los de ellas son más bajos, 14.568, según la Agencia Tributaria.

LA BRECHA SON LOS HIJOS

La brecha salarial continúa y las investigaciones relacionan casi toda la penalización a las mujeres en sueldo, oportunidades laborales y cargos directivos con cómo se cuidan los niños. Porque esa factura también es cosa de ellas. Las mujeres trabajan más a jornada continua y a tiempo parcial que los hombres (el 24,2% frente al 7,3% de los hombre), cogen la mayoría de las excedencias laborales y, en general, perciben que tener hijos afecta negativamente a sus carreras laborales. Sean las que sean. Y los Gobiernos (todos) ayudan poco. Por eso, porque la mayoría creen que la conciliación es un cuento chino, casi todas tienen su primer hijo pasados los treinta. Y muchas se quedan ahí, con un solo hijo.