A diferencia de otras campañas, donde hay más igualdad, el Black Friday no es un día especialmente señalado para el pequeño comercio. La secretaria general de Covaco-Confecomerç Castellón, Teresa Esteve, incide en que este segmento «no compra especialmente para rebajas ni ofertas como estas», por lo que no pueden competir con los atractivos descuentos de las grandes cadenas. Aun así, hay quien se une, con diferentes estrategias para incentivar la afluencia a sus tiendas. Una de ellas es el sorteo de 3.000 euros entre los clientes de locales adheridos a esta patronal.

Esteve añade: «En este 2019 hay quien incluso ha optado por no sumarse, y nosotros damos plena libertad para actuar en este caso». Al mismo tiempo, comenta que sus armas para luchar por la subsistencia pasan por «exponer productos a precios razonables», y aportar sus valores de «proximidad, calidad y trato diferenciado, de modo que el cliente tiene la garantía de que tiene lo que necesita». En cuanto a la campaña navideña, sus «expectactivas son buenas, incluso son algo mejores que en el 2018», finaliza.