A las puertas de las celebraciones de su 84º aniversario, que tendrán lugar hoy en la capital, la Generalitat ha declarado como bien de interés cultural (BIC) les Normes de Castelló, las reglas ortográficas suscritas en 1932 en la capital que consagran la unidad normativa del valencià y el catalán respetando las particularidades de cada territorio y que fueron asumidas por la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL).

El decreto del Consell especifica que les Normes son «fruto del consenso y establecen las bases para la unificación ortográfica del valenciano y dan unidad y coherencia a la normativa lingüística». El documento, firmado por 61 literatos, gramáticos y lingüistas e impulsadas por la Societat Castellonenca de Cultura para afrontar todos los cambios que estaba experimentando la lengua en una sociedad cambiante y garantizar así su uso social, administrativo y académico, consigue el BIC después de seis años.

El expediente lo arrancó por unanimidad plenaria el Ayuntamiento de Castellón en el 2011, lo revitalizó la Comisión de Cultura de la Diputación en el 2014 y lo rescató la Conselleria de Cultura hace apenas un año, en el 2015, dándole un empuje a la resolución del expediente.

Como partes integrantes de la declaración, Cultura ha incluido el Mecanoscrit de ocho páginas que conserva la Biblioteca Valenciana, y el borrador de las normas definitivas y de alto valor simbólico por contener parte de las firmas de adhesión, y la Casa Matutano de la calle Caballeros de la capital, sede actual del Museu d’Etnologia. El decreto establece una serie de medidas de protección y salvaguardia para velar por el normal desarrollo y pervivencia de les Normes.

APOYO INSTITUCIONAL // Numerosas entidades, como el Ayuntamiento de Castellón, la AVL y la UJI, mostraron ayer su satisfacción por la declaración. El concejal de Normalización Lingüística, Ignasi García, destacó que el BIC es «un avance más en el camino emprendido por los gobiernos de progreso para invertir el proceso del PP para minorizar la lengua». «El reconocimiento reivindica les Normes, que hicieron de Castellón capital lingüística, y refuerza la lucha para que esté presente en todos los ámbitos de la vida pública». El vicepresidente de la Diputación, Vicent Sales, puso el acento en el «hito histórico que supusieron y siguen siendo en el consenso de nuestros rasgos culturales como es la llengua».