Un total de ocho localidades costeras de la provincia extreman las medidas de seguridad y suman policías a sus filas durante los meses de verano. Son Peñíscola --16 agentes--, Benicàssim --10--, Orpesa --12--, Alcossebre --seis--, Xilxes--cuatro--, Almenara --cuatro--, Moncofa --dos-- y Almassora --uno--. Pero no son los únicos municipios que reestructuran su plantilla para afrontar las necesidades de la etapa estival. En el caso de la capital de la Plana, el Ayuntamiento destina un importante número de efectivos a la vigilancia de las playas --con puestos especiales--, el distrito marítimo y la zona de la Marjaleria.

En concreto, ocho agentes de la capital están dedicados en julio, agosto y septiembre a la seguridad en la playa y la tenencia de alcaldía del Grao está abierta las 24 horas del día.

En el caso de Burriana, aunque la plantilla local no se incrementa en los meses de verano, sí suma durante el Arenal Sound guardias civiles, policías nacionales y policías locales de otros municipios. Ante la llegada de miles de turistas y veraneantes, las localidades con mayor afluencia no dudan en blindarse contra el delito. N.B.B.