Recién licenciada, Lidón Serra de la Rosa se ganaba la vida a duras penas como abogada. Colaboraba en el despacho del prestigioso Isidro Niñerola en València -del que asegura estará "eternamente agradecida por todo lo que me enseñó"-, y atendía a sus primeros clientes en una diminuta oficina de la Vall d’Uixó. Recibió entonces a un cliente que podría haber dado varios ceros a su cuenta corriente, pero lo rechazó por sus comentarios hacia la que aún era su mujer.

19 años después mantiene la misma máxima: «No defiendo a maltratadores, ni a madres que no quieren que los padres vean más a sus hijos». No le ha ido nada mal, pues acaba de ser reconocida como la mejor abogada de familia de la Comunitat del 2019 en la quinta edición de los Legal Awards ofrecidos por la prestigiosa revista Acquisition International. "Este es el primer premio que me dan. No me había presentado a ninguno, tampoco a este, así que siempre es una alegría", admite la protagonista, que sí ha obtenido más de un galardón con la empresa tugesto.com que gestiona junto a su marido y en la que cuenta con 40 empleados.

La valldeuxense recuerda que la elección de su actual profesión fue casi fortuita: «En mi familia nadie se dedicaba al derecho, ni yo sabía lo que era ser abogado. Sé expresarme y escribir bien, y quería pedir cosas para otras personas, así que tras estudiar Derecho en València cursé un Máster en la Universidad Pontificia de Roma». Actualmente es una de las pocas especialistas de familia que existen en la provincia de Castellón y ha defendido tantos casos que ya ha perdido la cuenta. «Solo sé que cada vez tengo más trabajo», asume.

Sobre los clientes que más le han marcado durante su trayectoria recuerda los siguientes: «En este tiempo me he encontrado con tres o cuatro situaciones de madres que hasta la decisión judicial no dejaban a los hijos ver a sus padres. También me encontré con un padre que quería apartar a su madre de los niños porque esta era alcohólica. El porcentaje es ridículo, pero fue muy duro e injusto porque estos procesos pueden durar hasta dos años y recuerdo que antes de pedir el divorcio eran esos padres quienes se encargaban del cuidado de los pequeños». Añade que estas fueron las victorias que más saboreó: «Cuando los padres me enviaron las fotos con sus hijos me alegré más que nunca».

Asegura Lidón Serra que si algo le caracteriza es «el cuidado de los clientes. Empatizo completamente con ellos y mi atención es constante, porque cuando llegan aquí pasan por uno de los peores momentos de su vida». De hecho, asegura que son muchos los casos en los que antes que llegar a los tribunales pide a la pareja «que acudan a terapia para intentar arreglar su relación porque un divorcio es algo muy traumático, sobre todo si hay niños por medio». Y es que la letrada

Ojo a «los consejos de portería»

La letrada avisa que, «al igual que no hay que automedicarse, en caso de estar en proceso de divorcio no hay que atender a los consejos de portería, que suelen ser equivocados». Lidón Serra afirma que «el marco legislativo no ha evolucionado apenas, aunque ahora el beneficio del menor pasa por la custodia compartida y hace 40 años pasaba por que el padre viera a sus hijos a ratos», pero pide a las parejas que estén pensando en romper su relación «que se pongan en manos de abogados especializados». Pese a todo lo dicho destaca que «normalmente los padres son gente sensata y por fortuna en un 90% de los casos hay acuerdo antes de ir a los tribunales».