La mesa de trabajo que impulsa el Ayuntamiento de Castelló, a través de la Concejalía de Innovación Comercial y Consumo Sostenible, para elaborar la nueva ordenanza municipal reguladora de la venta no sedentaria en el Mercado del Lunes va extrayendo sus primeras conclusiones. Una de ellas pasa por potenciar el comercio autóctono y de proximidad: el consistorio habilitará un espacio único para que agricultores y apicultores de Castelló puedan vender su producción propia, así como zonas para planteristas, vendedores de caracoles y flores que acrediten su condición de productores primarios.

Así se desprende del borrador de ordenanza presentado la semana pasada en la mesa de trabajo del Consejo Sectorial de Comercio, el organismo consultivo integrado por representantes de las diferentes asociaciones de comerciantes de la ciudad. Lo explica David Donate, concejal de Innovación Comercial y Consumo Sostenible. «El cambio de modelo de gestión del Mercado del Lunes nos ha permitido abordar una nueva ordenanza y crear un nuevo marco en el que queremos impulsar y priorizar el consumo de productos locales», apunta. La intención del Ayuntamiento es que participen «tanto proveedores como comerciantes con tienda física a quienes les pueda interesar que en ciertos momentos puntuales del año puedan vender sus productos en un recinto donde cada lunes pueden pasar hasta 5.000 personas». Un ejemplo serían las floristerías en campañas como Todos los Santos o San Valentín.

Donate, cuya concejalía encabeza el proceso de transformación del popular Mercado del Lunes --el Ayuntamiento ha asumido la gestión tras la liquidación de la anterior concesionaria--, argumenta que con la incorporación de este espacio único en el borrador de la ordenanza quieren «poner en valor los productos locales y su calidad, facilitando la puesta a disposición de este espacio para productores y comerciantes locales».

Valoración / En la iniciativa también participa la Concejalía de Transición Ecológica que lidera Fernando Navarro, quien valora esta opción como «una oportunidad para favorecer el comercio de proximidad y ayudar a reactivar la agricultura». «El cambio en la ordenanza abre una nueva ventana para que nuestros productores tengan otra salida para poner a la venta sus cultivos y mejorar la rentabilidad», asevera el concejal.

El borrador de ordenanza fija en 550 el número máximo de puestos en el Mercado, que tendrá un horario de apertura al público de 8.30 a 14.00 horas.