Si el mestizaje de tres formaciones que contienen seis partidos, PSPV, Compromís (Bloc, Iniciativa y Els Verds) y Unides Podem (Podem y Esquerra Unida), llevó a una situación límite hasta aprobar in extremis las líneas generales del reparto del primer escalón del Botànic II, el diseño del segundo y el tercero, secretarías autonómicas y direcciones generales de la nueva Generalitat no resulta más sencillo.

Fuentes conocedoras de las reuniones que vienen celebrándose casi desde el minuto uno después de que, hace hoy una semana, el socialista Ximo Puig fuera investido president en Les Corts, apuntaron ayer que, lejos de las previsiones iniciales de haber podido cerrar ya la distribución entre los distintos partidos de los altos cargos, lo que se estima es que únicamente se habrá logrado acordar mañana el primer escalón, el de las secretarías autonómicas (habrá al menos dos en cada conselleria, un mínimo de 24 frente a las 17 del anterior gobierno). Y esto será así porque Puig ya ha anunciado que Consell aprobará en su primera reunión, mañana, viernes, esta cuestión, para dar a conocer los detalles después.

Podem y medio ambiente // Aunque todos contaban con tropiezos adicionales para el encaje de tantos partidos como están sobre el tablero de juego ahora, incluido Ximo Puig, quien ha reconocido esta misma semana que «habrá discrepancias», la fragmentación, además, de dos de las marcas en otras, como es el caso de Podem y sus enfrentamientos con su socia Esquerra Unida; e incluso las divergencias entre Iniciativa y Bloc, e incluso Els Verds, complican aún más el proceso.

El empeño de Podem de gestionar sin intermediarios las áreas de medio ambiente asignadas a los morados bajo el paraguas de la conselleria que preside Mireia Molla, de Iniciativa, es uno de los escollos que entorpecerían el acuerdo en estos momentos. La discusión estaría relacionada igualmente con el número de secretarías autonómicas, de las que ya se cuenta que al menos presidencia y la vicepresidencia de Mónica Oltra tendrán más de dos, mientras que, en función de lo que se pacte, el departamento de Molla podría sumar tres.

En cuanto a los nombres, responderán a criterios de cada formación y se da por hecho que los que quieran repetir lo harán. Entre los castellonenses, Francesc Colomer (PSPV) seguirá como secretario autonómico de Turismo; Enric Nomdedéu continuaría en Empleo; Alberto Ibáñez en Igualdad; y Mª Dolores Parra, en Internacionalización --dejaría entonces la Diputación--, todos de Compromís, mientras que se prevé que el exportavoz adjunto de Podem en Les Corts, César Jiménez, y el exalcalde de Vinaròs, Enric Pla, entren con algún cargo.