De las 39.799 empresas censadas en la provincia, la mitad --19.878-- no tiene ningún trabajador. Así lo refleja el Directorio Central de Empresas que publica el Instituto Nacional de Estadística. Aunque las mercantiles son 1.500 más que hace cuatro años y se sitúan ya en niveles precrisis, la estadística oficial muestra que el número de negocios que no tiene ningún empleado ha aumentado un 20% --3.938 más-- en los últimos quince años, prueba de que el autoempleo ha supuesto durante la recesión y en los primeros años de recuperación una de las pocas salidas para reengancharse al mercado laboral.

Un tercio se las empresas sin trabajadores las absorbe en Castellón el sector de la construcción y el pequeño comercio. En tercer lugar destaca, asimismo, la actividad inmobiliaria. Este fenómeno responde, en esencia, a que muchos negocios en los que el propietario contaba con uno o dos trabajadores en plantilla optaron por prescindir de ellos para hacer frente a la caída de ingresos sin tener que bajar la persiana.

Eso fue, precisamente, lo que le sucedió a Fernando Carrascal, gerente de un pequeño quiosco en la capital. Una papelería que tuvo que despedir a su dependienta en el 2009 por la caída de los ingresos. «Me puse yo a despachar y mi sobrina me ayudaba en sus ratos libres. Fue la única opción que tuve para no echar el cierre», argumenta el castellonense.

En el año 2008 entraron en concurso de acreedores 48 empresas de Castellón que no tenían ningún trabajador. Un año después, ya eran más del doble --112--.

COVACO / Desde la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunitat (Covaco) destacan otros factores, además de la crisis, que han perjudicado sustancialmente al pequeño comercio en los últimos años. «Nos hemos encontrado con el auge de la venta on line, que ha hecho mucho daño al negocio local y con un cambio en los hábitos de consumo», asegura la secretaria general de Covaco Castellón, Tere Esteve. «Nos hemos tenido que adaptar como hemos podido a la coyuntura y muchas tiendas han tenido que despedir a sus trabajadores o echar el cierre. No hemos tenido oportunidad para crear empleo, como otros sectores y estamos resistiendo como podemos a una crisis aún presente», incide la representante provincial.

El área que más acusa la situación es, según Covaco, la de la ropa y los complementos --los que más venden on line--. Por el contrario, aseguran que quienes mejor aguantan el tirón son los establecimientos de salud y estética.

EL RECICLAJE DEL AUTÓNOMO / A partir del 2014, coincidiendo con las primeras señales de reactivación y con los estímulos aprobados por el Gobierno para fomentar el autoempleo, el número de empresas sin trabajadores aumentó de forma notable en la provincia. Además de la incidencia de los despidos, cabe tener en cuenta la puesta en marcha de la tarifa plana de 50 euros de la que se beneficiaron los nuevos autónomos que se dieran de alta.

Una medida que provocó el reciclaje de personas en paro que tenían serios problemas para encontrar un empleo como asalariados. El resultado: casi mil nuevos negocios en un año.