El presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, reprochó ayer al Consell «sus continuas injerencias» y «numerosos ataques» contra las competencias de la institución provincial, en línea con el enfrentamiento que ambas administraciones mantienen por temas como el dinero asignado a los pueblos, el decreto de coordinación de turismo y deporte, o el Consorcio Hospitalario, desde un nuevo escenario, el de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), en cuya reunión de la junta de gobierno participó ayer.
Al término del encuentro, Moliner explicó que uno de los puntos tratados por los máximos representantes de la FEMP fue la búsqueda de fórmulas para mejorar la gestión que los ayuntamientos y las diputaciones prestan en su ámbitos de influencia.
En este contexto, indicó, «se ha planteado la posibilidad de pedir al Gobierno una reforma de la financiación local, así como el fin de las injerencias de los gobiernos autonómicos en los ayuntamientos y las diputaciones».
El presidente de la Diputación de Castellón defendió el papel de las entidades locales y provinciales frente a lo que entiende como los «numerosos ataques que están sufriendo por parte de las administraciones autonómicas y que, desgraciadamente, repercuten directamente en la capacidad de poder prestar más y mejores servicios por parte de los ayuntamientos y diputaciones».
el eje en Castellón // Las referencias de Javier Moliner en este sentido no fueron solo generales, sino que situó el eje en Castellón y cargó contra la Generalitat valenciana que preside Ximo Puig, al criticar, en el contexto de los asuntos tratados por la Federación Española de Municipios y Provincias, «las innumerables intromisiones» que están sufriendo «en la provincia de Castellón por parte de un Consell que, en su afán de politizar la gestión pública, está restando oportunidades a los castellonenses y frenando iniciativas y servicios que generarían mayores posibilidades laborales y de crecimiento para los vecinos», argumentó.
El presidente provincial recordó en esta línea que «el pleno de la Diputación de Castellón aprobó en la sesión del mes de octubre el solicitar a la Generalitat que cumpla con la suficiencia financiera que le exige la ley y deje de arrinconar a la provincia». La institución castellonense instó al Consell a igualar los ocho millones de euros que destinará a inversiones en los pueblos. H
