El presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, defendió ayer en Bruselas «medidas para bajar los costes energéticos y mantener los puestos de trabajo del sector cerámico». Así lo manifestó tras reunirse con el comisario europeo de Acción por el Clima y la Energía, Miguel Arias Cañete, a quien le trasladó «la preocupación existente en la provincia en torno a las propuestas que plantea el Gobierno de España en el borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec) y su afección a la cogeneración energética y, por tanto, a los costes y la competitividad del sector cerámico».

Tras el encuentro, el dirigente provincial incidió en que era «vital» trasladar esta inquietud a las instituciones europeas, pues Bruselas se encuentra «en pleno proceso de reflexión sobre el futuro de los planes que los estados miembros han elaborado en materia energética para la próxima década». Moliner trató de «hacer ver» al comisario Cañete «la necesidad de reconsiderar algunas de las propuestas que se han hecho por parte del Ejecutivo central» que, a su entender, «condenan la cogeneración en el sector cerámico». El presidente de la Diputación incluso apuntó que el incremento de los costes energéticos «conduce a que las empresas puedan acabar decidiendo irse a producir a sitios donde la factura es mucho más barata».

Moliner hizo especial hincapié en: «Somos muy conscientes que nos jugamos muchos puestos de trabajo, y precisamente pensando en ello había que estar aquí aquí defendiendo sus intereses y pensando que si las empresas son competitivas el nivel de empleo se mantendrán». El dirigente agradeció a Cañete que le recibiera, pues «no es habitual que un comisario se reúna con un mandatario provincial.