La Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública admite el retraso de siete meses que acumula la nueva área oncológica del Hospital Provincial y lo atribuye a la existencia de problemas técnicos y a la falta de permisos relacionados con la maquinaria del sótano, fundamentalmente el acelerador lineal y la cámara hiperbárica. Y es que aseguran que la obra ya está «entregada».

Fuentes del departamento que dirige Carmen Montón explicaron a Mediterráneo que la puesta en marcha del acelerador lineal está pendiente de la licencia del Consejo de Energía Nuclear (CEN). Asimismo, indicaron que los técnicos que se encargarán de utilizar este dispositivo, que permite destruir células cancerosas a los afectados, todavía están en periodo de formación. Con todo, calculan que el tratamiento a pacientes con esta tecnología «comenzará, aproximadamente, dentro de un mes».

De cumplirse estos plazos, el acelerador, que ha costado 3,1 millones de euros al consorcio sanitario, entraría en funcionamiento un año después de lo previsto. Y es que, como las obras del sótano del edificio Borrás, también la definitiva puesta en marcha de este dispositivo acumula retrasos y plazos incumplidos. Tras anunciar su compra en el marco de un consejo de gobierno del hospital en noviembre del 2015, Montón dijo que estaría en funcionamiento en un plazo de 12 meses.

Posteriormente, ya en marzo del 2017, el gerente del centro, Joaquín Sanchis, aseguró que tanto el acelerador como la cámara hiperbárica estarían disponibles para atender tumores entre mayo y junio, un plazo que tampoco se ha cumplido. Una tercera previsión, para septiembre, también venció sin noticias de ambas herramientas.

SEIS AÑOS SIN LA CÁMARA // El caso de la cámara hiperbárica es similar, aunque en este caso la Conselleria de Sanidad informa de que tan solo falta el montaje de una línea de alta presión de oxígeno, unos trabajos que la empresa adjudicataria está acometiendo en estos momentos. Esta herramienta, muy utilizada por los oncólogos para recuperar a los pacientes tras los tratamientos, fue adquirida por el Provincial hace seis años y aún no ha sido usada.

EL PET TAC, EN DICIEMBRE // Por último, el nuevo edificio de Oncología dispondrá de una gamma-cámara y un PET TAC que, según las fuentes citadas, ya fue adjudicado a una empresa alemana. El contrato se formalizó el 1 de agosto, y su llegada definitiva al centro sanitario castellonenses está prevista para diciembre.

Los trabajos del sótano costaron 2,5 millones de euros que pagaron a medias la Diputación de Castellón y la Generalitat.