Las víctimas mortales en las carreteras de la provincia de Castellón han alcanzado este 2016 la cifra más alta de los últimos siete años. Así lo refleja el balance de la Jefatura Provincial de Tráfico, según el cual a falta de un mes para que termine el 2016 han fallecido 32 personas en las vías interurbanas, lo que supone la cifra más elevada desde 2010, alza que podría explicarse con el aumento del tráfico en paralelo con el repunte económico.
Son datos de víctimas a 24 horas en vías interurbanas. Si, además, se suman los decesos en vía urbana --cinco-- y los ocurridos días después del accidente, la cifra sube a 39. El presidente de la asociación provincial de autoescuelas, Antonio Pertegaz, apunta que «la circulación se ha visto este año incrementada, tiene una mayor intensidad», lo que puede haber influido en la siniestralidad mortal. Los datos del Ministerio lo corroboran. Por ejemplo, la N-340 a su paso por kilómetro 996,48 ha registrado todos los meses del 2016 una intensidad media diaria de vehículos superior al 2015. En septiembre, por ejemplo, la usaron 10.244 como media, frente a 9.563 en el 2015.
La A-7 también. En el punto de control que hay en el kilómetro 287,6 la circulación ha sido más intensa. En septiembre por ejemplo, la usaron 49.270 vehículos por día frente a 46.297 en 2015.
Por el contrario, el presidente de Automovilistas Europeos Asociados, Mario Arnaldo, pone de manifiesto que hay menos accidentes con víctimas, lo cual es algo positivo y desmontaría la tesis que vincula mayor tráfico y más accidentes mortales.
En ese caso, indica, habría que analizar si el aumento de accidentes mortales se ha producido debido a un incremento de la ocupación de los vehículos accidentados (que no es el caso) o a que los siniestros han sido más virulentos, bien porque han sido debidos a choques frontales o a que los accidentados no hacían uso del cinturón de seguridad.
La última víctima se produjo esta semana cuando un anciano de 82 años perdió la vida en la nueva variante de la N-340 en Benicarló en un choque frontal.
Pertegaz señala que debería instaurarse en formación y revisión de los conocimientos de los conductores. En ese sentido, subraya que podrían impartirse cursos de reciclaje para conductores, aunque sea gratis en las autoescuelas, para que refresquen las normas fundamentales y se conciencien un poco. Señala que la anterior directora general de Tráfico, María Jesús Seguí, manifestó que sería bueno que la renovación del permiso viniera acompañada de un test o de una formación, algo que él apoya. H
