Cada muerte o secuela provocada por un siniestro en la carretera deja una huella imposible de borrar en cada familia, pero la frialdad de las estadísticas arroja datos esperanzadores en Castellón, que lidera el descenso en el número de fallecidos en accidentes de tráfico de la Comunitat. Si el 2018 fue considerado como un año trágico, con un total de 29 decesos en vías interurbanas, el 2019 ha visto rebajada esa trágica cifra hasta la mitad, con el resultado de 15 bajas.

Nunca hasta ahora se había registrado un dato así, al menos en los últimos 27 años. Si se analizan los resultados del Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la Dirección General de Tráfico (DGT), se comprueba que lejos quedaron los tiempos en los que superar el centenar de víctimas mortales en cada ejercicio formaba parte de la normalidad. En este sentido, el 1996 fue el más luctuoso, con 120 pérdidas humanas. En la vertiente más positiva, el periodo que más se acercó al 2019 fue el 2013, en plena crisis económica, cuando se contabilizaron 17 muertos. Una cantidad que, solo tres años más tarde, se dispararía hasta el doble.

BALANCE / El repaso de incidencias en los últimos 12 meses revela que hubo 511 accidentes con víctimas en la provincia, lo que significa que hubo muertos o heridos. El apartado también refleja una mejoría sobre el 2018, cuando el recuento alcanzó los 583.

En cuanto al conjunto de la Comunitat, los fallecidos en el 2019 en las carreteras fueron 99, con un descenso de 33 sobre el 2018. La única provincia del territorio autonómico que rompió la tendencia general fue Alicante, con un incremento de tres personas sobre los 40 del periodo precedente. A la hora de valorar las estadísticas, el delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Fulgencio, detalló que los resultados «muestran que se está en el buen camino, aunque queda mucho por hacer hasta reducir a cero el número de fallecidos y accidentes». Fulgencio agradeció «la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en especial al sector de Tráfico de la Guardia Civil, y también a los conductores», a la vez que puso en valor algunas de las actuaciones llevadas a cabo por el Gobierno central, como, entre otras cosas, la disminución de la velocidad en las carreteras secundarias de doble sentido. De esta manera, de 100 kilómetros por hora se pasó a 90.

LIMITACIONES / En el caso de Castellón, otra medida implantada en los últimos meses fue el veto al tráfico pesado en la carretera nacional 340, entre Torreblanca y la localidad catalana de l’Hospitalet de l’Infant. De esta manera, los camiones redujeron de manera sensible su presencia en esta vía. A cambio, el Ministerio de Fomento adoptó una bonificación del 50% para el pago del peaje por la AP-7 a los vehículos de cuatro o más ejes. Medida que desapareció el pasado martes, cuando la gratuidad de la autopista se extendió a todos los usuarios de la vía. Las limitaciones ya estaban presentes en otras zonas de la provincia, con la autovía A-7 como paso alternativo.