Figuras humanas que se alzan al cielo aupadas por una base de manos que afianzan la subida. La Conlloga Muixeranga de Castellón ejercerá de anfitriona de la Muixeranga de la Safor, de Gandia, y de la colla castellera Xiquets de Reus el día 30, segundo sábado de la Magdalena 2019, en una plaza Huerto Sogueros que reunirá a cientos de personas en una cita que cumple cuatro años y que, edición a edición, va a más.

El presidente de la Conlloga Muixeranga de Castelló, Enric Sorribes, anunció ayer la convocatoria en el Menador, avanzando que prevén que, «entre los tres grupos, haya unas 700 personas entre muixeranguers, castellers y músicos, el doble que en la primera edición». «Es una trobada que se consolida en el calendario y en la que se invita a diferentes modalidades de muixerangues, del más alto nivel, como las de Algemesí o l’Alcúdia, muy tradicionales, y que arrastran a mucha gente de norte a sur de la Comunitat; junto a una muestra de los castells catalanes, que están arrancando su temporada, para mostrar las diferencias, que son muchas», explicó el presidente.

UN ALTO NIVEL //

Esta tradición «recuperada en Castellón» toma fuerza en la recta final de la Magdalena, en un sábado que tiene como protagonista la Ofrena a la Mare de Déu de Lledó por la mañana y por la tarde. Y cada año, la cita suma adeptos entre las collas muixarangueres de la Comunitat Valenciana. En esta ocasión, Sorribes prevé que se desplacen «para hacer piña en las bases» miembros de la Torrentina de Torrent y otras de Alicante, aunque «los primeros cordones y los xiquets y xiquetes, que son los que coronan las figuras en la muixeranga, son de la colla castellonense».

El son de dolçaina i tabal acompaña a las torres. «Este año intentaremos algo nuevo, especial, y muixerangues de 4 y 5 alturas más complicadas», apostilló.